Reforma laboral alista debut en el Congreso: ya está en la presidencia

El último borrador de la reforma laboral que redactó el equipo técnico del Ministerio del Trabajo ya fue despachado para su revisión a Presidencia, instancia que como es la tónica definirá la oportunidad de envío de proyecto al Congreso antes del 31 de diciembre.

Una fuente bien informada asegura que dicho documento -que viene precedido de cinco borradores- es considerado en Trabajo como el proyecto de ley definitivo que irá con la firma de la presidenta Michelle Bachelet al Parlamento.

En la cartera de Huérfanos 1.273, de todos modos, aclaran que se sigue escuchando a los diversos actores involucrados con tal de ir incorporando visiones al proyecto.

Ya sabido que La Moneda optó por respetar el acuerdo adoptado con la CUT en julio y enviar el texto antes de fin de año, en la Nueva Mayoría ven que diciembre es un mes complejo en términos legislativos, porque tanto la primera como la última semana de ese mes los parlamentarios tendrán receso producto de las fiestas de fin de año.

"A eso se suma que durante la semana de Navidad habrá sólo uno o dos días de sesión", agrega un legislador del oficialismo que ha conversado de estos temas con la ministra del Trabajo Javiera Blanco.
Además de la agenda laboral, en el último mes del año deberán ingresar las leyes "Ricarte Soto" de medicamentos, elección directa de intendentes, agenda corta de seguridad.

Uno de los escenarios que se baraja en el Ejecutivo es que el proyecto se envíe a trámite en torno a la segunda quincena de diciembre con urgencia simple.

Su debate también coincidirá con la iniciativa de cambios al seguro de cesantía que debutaría en los próximos días.

Aún no está totalmente zanjado si el texto que fortalece la negociación colectiva y la sindicalización comenzará a debatirse en la Cámara de Diputados o en el Senado. En todo caso, ha ido cobrando fuerza la idea de que la iniciativa sea vista primero por la Cámara Alta, como una señal de querer buscar acuerdos amplios en la materia.

Lo que sí ya se ha conversado con los congresistas del oficialismo es que el proyecto laboral sea tramitado y despachado desde el Parlamento en un tiempo acotado: primer semestre de 2015, para así dar estabilidad y certidumbre al mercado.

Un parlamentario del bloque considera razonable el plazo, pues a su juicio en todos esos meses deberían haber audiencias en el Congreso con todos los actores y expertos en temas laborales.

Siguen reuniones
Mientras se espera la definición de Presidencia, la ministra Blanco ayer profundizó el proceso de diálogo pre legislativo con los parlamenarios de la Nueva Mayoría.

Los primeros en llegar hasta el ministerio fueron los senadores DC Carolina Goic, Andrés Zaldívar, Jorge Pizarro; y diputados Gabriel Silber y Matías Walker. Luego recibió a la diputados y senadores del PPD.
Blanco confirmó que la agenda -como ahora le llaman en La Moneda a la reforma laboral- será ingresada antes del 31 de diciembre. Añadió que "de aquí a la presentación del proyecto, vamos a seguir teniendo todas las reuniones que sean necesarias".

El jefe de la bancada de senadores de la DC, Jorge Pizarro, aseguró el respaldo de su partido al proyecto y ratificó el compromiso con la idea "de despachar esta agenda laboral durante el primer semestre de próximo año".

El también senador falangista Andrés Zaldívar se cuadró con el objetivo de emparejar la cancha en relaciones laborales, pero puso una cuota de matiz ante el debate legislativo que se viene. "Ustedes me conocen, siempre hay que estar abierto a escuchar y a ver si hay ideas que uno pueda acoger, no es mostrar debilidad el aceptarlas si son para perfeccionar los proyectos. Todas las cosas son perfectibles, ninguno puede creer que tiene la varita mágica para las cosas perfectas", dijo.

El vicepresidente de la CUT, Nolberto Díaz, valoró que la iniciativa se envíe antes del 31 de diciembre, pero anticipó que buscarán incorporar otros temas, como la norma de despidos, que quedarán fuera del texto.