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Los PhD y la industria

Andrés Meirovich

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Andrés Meirovich

En el último tiempo, un grupo de estudiantes de doctorado, becados por Becas Chile, han puesto la voz de alerta en relación a cuál va a ser su futuro una vez terminados sus estudios. Esto, ya que el hecho de recibir la beca los obliga a regresar a nuestro país para poder transmitir sus conocimientos a la sociedad nacional. Lo que ellos comentan es que en Chile no existe la demanda para absorber a todos los egresados, sumado a que son muy pocas universidades las que cuentan con un foco de investigación en que ellos puedan desarrollar lo aprendido. Este es un problema que no es único en Chile y anteriormente ocurría en muchos países. ¿Cómo se solucionó?
Las universidades entendieron la problemática y en la formación de los doctorados empezaron a incluir términos como emprendimiento y empresa en su vocabulario. Sumado a lo anterior, se fueron creando oficinas de transferencia tecnológica cada vez más potentes.

Con esto, las empresas fueron entendiendo los beneficios de contar con profesionales extremadamente calificados y estos se dieron cuenta que era una buena opción trabajar en el mercado privado. Como ejemplo destacable de esto está la oficina de transferencia tecnológica del MIT (TLO). Su misión es, a través del licenciamiento de tecnologías, la inversión comercial en el desarrollo de nuevas invenciones y descubrimientos que derivan de la investigación realizada en el MIT e instituciones asociadas (Lincoln Laboratory y el Whitehead Institute). 
Del gran volumen de Divulgaciones (Disclosure), en promedio los últimos 5 años el 51% de estas divulgaciones pasó a ser una aplicación de patente. A su vez, del volumen de aplicaciones de patente, en promedio los últimos 5 años el 62% de las aplicaciones resultó en una patente concedida. En 2013 el MIT obtuvo un total de US$ 80 millones en ingresos por licenciamiento.

La TLO del MIT aprovecha la gran cantidad de Centros y Laboratorios que posee la universidad recibir a los investigadores y estar actualizándose continuamente en los últimos avances. Por el lado de la industria, la TLO trabaja fuertemente sus redes para estar actualizando a las compañías de los últimos avances relacionados y los insta a acercarse a la TLO cuando surgen nuevas necesidades en sus compañías . Con este flujo de información, la TLO puede orientar mejor a los Centros para lograr investigaciones con mayor potencial de transferencia.

A 2014, más de 700 compañías trabajan con académicos y estudiantes en distintos programas especiales y específicos. En 2013, la investigación directamente patrocinada por la industria totalizó US$ 128 millones, representando el 19% de todos los fondos de investigación del MIT. Por ejemplo, en el Industrial Liaison Program trabajan con más de 200 compañías facilitando la interacción con el MIT y las agendas de investigación.

Debemos incentivar la creación y el desarrollo de más y mejores oficinas de transferencia tecnológica en Chile, así como seguir evangelizando de los beneficios para estos profesionales y para los actores de la industria. Es un circulo realmente virtuoso.

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