Crecimiento de las regiones en 2017
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Un crecimiento dispar -que sigue representando un desafío país- se observó a lo largo del territorio nacional durante el año pasado, según los resultados que arrojó el Indicador de Actividad Económica Regional (Inacer) que elabora el Instituto Nacional de Estadísticas (INE).
Mientras el Producto Interno Bruto (PIB) total se expandió a una velocidad de 1,6% -lo que será confirmado el próximo 19 de marzo-, cinco zonas del país lo hicieron a un mayor ritmo. El liderazgo en el período lo ejercició Magallanes con una variación de 10,8%, secundada por Los Lagos (5,7%) y Arica y Parinacota (4,4%).
A las anteriores se sumaron Los Ríos (4,1%), La Araucanía (2,8%), Biobío (1,3%), Tarapacá (1,2%), Valparaíso (1,1%) y O´Higgins (0,3%).
En el otro extremo, hubo cinco regiones cuya actividad terminó con caídas, dos más que las observadas durante 2016. El descenso más acentuado lo registró Atacama (-4,7%), seguida por Aysén (-3%) y Antofagasta (-1,2%).
De menor cuantía fueron las disminuciones en Maule (-0,8%) y Coquimbo (-0,3%).
Dado este cuadro, nuevamente quedó en evidencia el relativo mejor pasar de la zona sur de la mano de recuperaciones de ciertas industrias, como la pesquera y también la manufacturera, lo que se condice con menores tasas de desocupación.
En el norte, en cambio, la desaceleración en la minería -principalmente del cobre- dejó secuelas, que es probable que se subsanen durante este año gracias al repunte en la cotización del metal y al esperado aumento de la inversión. A esto obviamente ayudará un ambiente de políticas públicas donde el foco esencial vuelve a ser el crecimiento del PIB.
