Inteligencia británica: "Amenaza terrorista crece a velocidad y escala sin precedentes"

El Reino Unido está experimentando una amenaza terrorista que evoluciona a una velocidad y escala nunca antes vistas, advirtió el jefe de la agencia de inteligencia nacional en un inusual discurso público.

Andrew Parker, director general del MI5, dijo que siete complots de extremistas islámicos han sido frustrados desde marzo y la policía ha arrestado un número récord de personas por delitos terroristas en respuesta a una amenaza que "nos llega más rápido y puede ser más difícil de detectar".

"La escala en la que operamos es mayor que nunca", dijo. "Ahora estamos ejecutando más de 500 operaciones en vivo que involucran a alrededor de 3.000 personas que se sabe están actualmente involucradas en actividades extremistas de alguna manera".

Ha habido cinco ataques terroristas en suelo británico en 2017 en uno de los años más sangrientos en la historia de la posguerra del país. Los jefes antiterroristas elevaron el nivel de amenaza a crítico por un tiempo, lo que significa que los ataques eran inminentes. Eso sucedió dos veces bajo la primera ministra Theresa May.

A principios de este año, atacantes con furgonetas y cuchillos agredieron a transeúntes en los puentes de Westminster y Londres en dos atentados separados, y una furgoneta arrolló a feligreses afuera de una mezquita en Finsbury Park.

Un atacante suicida detonó una bomba al término de un concierto en Manchester en mayo, matando a más de 20 personas, incluidos niños y madres. En septiembre, un dispositivo improvisado explotó en la red subterránea de Londres, hiriendo a 30 personas.

El amento en los ataques terroristas, dijo Parker, ha sido impulsado por la "estrategia asesina del Estado Islámico y propaganda en Internet". Conforme es desplazado de Siria e Irak, el grupo está instando a potenciales terroristas a concentrarse en otros lugares, dijo. Eso hace que la amenaza sea "más diversa" que nunca.

Parker enfatizó la importancia de trabajar en estrecha colaboración con colegas europeos y también hizo un llamado a las compañías de tecnología para que no proporcionen una plataforma para que los terroristas planeen los ataques.

"Tenemos una responsabilidad compartida de hacer todo lo posible para evitar la explotación terrorista de servicios por Internet", dijo Parker.