IA para un Estado que funcione
Señor Director:
El balotaje del 14 de diciembre vuelve a evidenciar las brechas operativas del Estado para gestionar procesos críticos. En democracias desarrolladas, la inteligencia artificial (IA) ya se utiliza para detectar anomalías electorales, anticipar desinformación y optimizar la movilidad hacia los centros de votación. No reemplaza instituciones: exige que operen mejor.
Chile lidera la región en adopción de IA, pero ese capital no se refleja en la infraestructura pública. Un proceso electoral robusto requiere análisis de datos en tiempo real, logística eficiente y alertas tempranas. Integrar IA con gobernanza clara no es futurismo; es asegurar continuidad, credibilidad y un Estado que responde.
Jacinto Obispo
Director de Tecnología de Apiux
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