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Chile deja de ser percibido como el país menos corrupto de América Latina

En la última medición estaba en el lugar 21, pero los casos Penta, SQM, Corpesca y Caval lo hicieron caer al 23. En Chile Transparente confían en que las nuevas leyes permitirán revertir la situación.

Por: A. Murga y F. Duarte | Publicado: Jueves 28 de enero de 2016 a las 04:00 hrs.
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El 13 de enero en conversación con el Diario Financiero el presidente de Transparencia Internacional, José Ugaz, adelantó que Chile descendería en el ranking de países menos corruptos del mundo. Y así fue.

Es que las polémicas por el financiamiento irregular de la política —que derivó en los llamados casos Penta, SQM y Corpesca—, además del caso Caval en el que se ha visto involucrada la familia presidencial, junto con las denuncias por la colusión de las empresas, han minado la confianza.

Pero no sólo de la ciudadanía, también de algunos organismos como Transparencia Internacional, que ayer dio a conocer el Índice de Percepción de la Corrupción 2015.

En el informe Chile registró su peor ubicación en cuatro años. En 2012 nuestro país estaba en el lugar número 20, un año después descendió al 22 y en 2014 subió un puesto.

Sin embargo, en 2015 volvió a retroceder ubicándose en la posición 23 a nivel mundial. Algo que se tradujo en que dejara de ser el país más probo de Latinoamérca, ubicándose detrás de Uruguay. El menos corrupto del mundo es Dinamarca.

Pero esta no es la primera vez que Chile desciende en el índice. En 2009 registró su peor evaluación ocupando el lugar 25 tras los escándalos de Chile Deportes, Publicam y el Programa Puente.

“No hay corrupción”

Según el presidente de Chile Transparente, Gonzalo Delaveau, la percepción de que hay corrupción en nuestro país aumentó, porque instituciones como la prensa o la fiscalía están haciendo su trabajo.

“No nos extrañaría que aparecieran más casos y eso está bien porque se investigan y se castigan, cuestión que es bien recibida en el extranjero”, afirmó.

No obstante, precisó que en nuestro país no hay corrupción como sí ocurre en otros lugares donde los narcotraficantes han logrado financiar campañas políticas o sobornar a funcionarios públicos.

“Acá hemos tenido casos de colusión. Eso es engañarse y engañar a otros, pero no es corrupción”, aseguró Delaveau.

Además, dijo el abogado, en Chile se está reaccionando a raíz de los últimos casos que se han conocido y las autoridades están legislando para separar la política de los negocios.

Pero los esfuerzos parecen no ser suficientes. Ello porque, según Delaveau, existen vacíos en la nueva normativa.

“Las pre campañas y las primarias no están bien reguladas en la misma ley”, advirtió el presidente del capítulo chileno para la transparencia, quien está preocupado por ese tema.

Sin perjuicio de eso, el profesional está confiado en que Chile subirá en el ranking de los países menos corruptos del mundo.

“Esta caída terminará en un alza una vez que se instale la cultura de la probidad”, advirtió Delaveau, quien recalcó que “países que hoy están mejor que nosotros en el ranking ya pasaron por esto”.

En ese contexto, aseguró que Chile tiene todo para sobresalir aún más por sobre los otros países de la región.

“Tenemos un barrio tan malo, que eso nos permite destacar por sobre todos”, sentenció Delaveau.

Alberto Pretch: "La caída nos tiene que alentar para reaccionar y pasar a las mejores posiciones del mundo"


Que Chile haya perdido tres puntos y dos posiciones respecto a 2014 en el ranking de percepción de la corrupción que elabora Transparencia Internacional (TI) es "una mala noticia", pero también subraya que la sociedad ya no trata de esconder las malas prácticas, explica a DF Alberto Pretch, director ejecutivo del capítulo chileno de TI. En su opinión, si hay una buena gestión de los casos abiertos en este momento, Chile podría caer un poco más en el ranking en el próximo bienio para luego repuntar de forma sólida.


- ¿Cómo se interpreta la baja en el ranking?


- Caer es siempre una mala noticia. Afecta a cómo es percibido el país y cómo los chilenos perciben el entorno en que vivimos. También demuestra que en los dos últimos años se han destapado prácticas que antes se trataban de tapar bajo la alfombra. Nos tiene que alentar a reaccionar para no sólo volver a liderar en la región, sino que pasar a las mejores posiciones del mundo.

- ¿Qué mensaje manda a las autoridades esta caída?

- Que tienen que reaccionar. La justicia ha actuado, el Ejecutivo ha hecho un trabajo interesante desde la Comisión Engel y el Parlamento ha reaccionado bastante bien, aunque quizá no al 100% de cómo nos gustaría. Es también un mensaje para que no sólo se dicten leyes, sino que se den señales importantes de austeridad.

- ¿Cómo evalúan las medidas anticorrupción en trámite?

- Hay un avance muy positivo en toda la agenda anticorrupción y también en la prontitud y severidad de los parlamentarios. Pero quedan brechas, la más importante es la del financiamiento en los períodos preelectorales, que creemos quedó desregulado. En materia de partidos, nos gustaría que las obligaciones de transparencia fueran aún mayores.

- ¿Qué desafíos enfrenta Chile para mejorar su posición?

- Que no haya sensación de impunidad ante los casos de corrupción. También que la reacción de la institucionalidad no sea la adecuada y, como vemos, existen riesgos de brechas. Por último, que la ciudadanía normalice la situación. Hay países en que la percepción de corrupción es alta porque se han normalizado estas prácticas. Pero creemos que los chilenos somos bastante intolerantes a la corrupción y eso es una buena noticia.

- ¿Es posible llegar a estar entre los 10 o 20 mejores?

- Si salimos bien de estos casos, se reacciona adecuadamente, se cierran las brechas en el financiamiento de precampaña y se dan señales de austeridad en el gasto público, podemos dar un salto importante. Pero es un camino de largo plazo y se requiere además un cambio cultural más profundo.

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