SII pone la lupa sobre 5.700 contribuyentes por uso del fondo para reinvertir utilidades y postergar los impuestos finales

Uno de los focos del Servicio de Impuestos Internos (SII) este año serán los contribuyentes de alto patrimonio, segmento del cual busca recaudar parte importante de los US$ 2.300 millones contemplados en su Plan de Gestión de Cumplimiento Tributario (PGCT).

Alineado con este objetivo, la entidad ha posado su mirada sobre el uso del denominado Fondo de Utilidades Reinvertidas (FUR), registro que busca estimular el aumento de recursos disponibles para invertir en las empresas, mediante la postergación del pago de los impuestos finales.

Así, una vez que se enajene el capital asociado a esa reinversión, la compañía receptora deberá pagar los tributos que en su minuto se suspendieron.

De acuerdo a la normativa, los recursos que se asumen como reinvertidos pueden moverse entre sociedades.

Este mecanismo estuvo disponible hasta el 31 de diciembre de 2016, pero así y todo hay varios contribuyentes que declaran hasta el día de hoy saldos: en la Operación Renta 2020, un total de 1.066 informaron montos en el FUR por un total de $ 1.627.612 millones (o US$ 2.258 millones al tipo de cambio actual).

Ante esto, el servicio comenzará este mes a ejecutar un plan de medidas para abordar posibles incumplimientos en el correcto pago de los tributos en el uso del FUR.

La subdirectora de Fiscalización de la entidad, Carolina Saravia, señala que se aplicarán acciones de tratamiento “proporcionales” al nivel de cumplimiento tributario.

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“Por ello, para abordar las posibles brechas de cumplimiento de contribuyentes que registraron utilidades en el FUR, se contempla desde la entrega de orientación y asistencia hasta la aplicación de un mayor control y sanción para quienes deciden no cumplir, afectando la recaudación tributaria y con esto, los recursos necesarios para la implementación de diversas políticas públicas que se requieren hoy más que nunca”, asegura la directiva.

Saravia explica que la estrategia contempla una etapa inicial con medidas preventivas y colaborativas, como la comunicación de inconsistencias a los contribuyentes para que corrijan la información en la próxima Operación Renta.

También se realizarán charlas con segmentos específicos, como asesores tributarios y contadores.

Mientras que durante el primer semestre, el servicio aplicará las acciones de tratamiento correctivas proporcionales que correspondan a cada contribuyente, entre las que están las revisiones de cumplimiento y auditorías.

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La directiva detalla que el objetivo es solucionar las brechas de información y declaración, así como también verificar el correcto cumplimiento tributario de los contribuyentes de los impuestos finales que se vieron beneficiados con la aplicación de las normas de reinversión vigentes hasta el 31 de diciembre de 2016, cuyos efectos continuarán en el futuro.

¿Quiénes incumplen?

El SII detectó a 5.700 contribuyentes con potenciales brechas, a los cuales se les agregan también las personas naturales (socios o accionistas) que pudieran haber incumplido con la declaración y pago de los retiros en sus impuestos finales.

Considerando su clasificación de riesgo, un 19% de los contribuyentes con posibles brechas corresponde a contribuyentes de riesgo alto, un 25% a riesgo medio y clave, y un 55% a riesgo bajo.

De lo visto, aproximadamente el 20% pertenece al segmento de altos patrimonios.

Entre los rubros en donde se concentran principalmente las inconsistencias, Impuestos Internos identificó a los relacionados a actividades financieras y de seguros (21%), a las actividades profesionales, científicas y técnicas (15%), a las actividades inmobiliarias y comercio al por mayor y al por menor, y el de reparación de vehículos automotores y motos, con un 9% cada uno.