Gobierno

Los pasos de Julio Pertuzé para subir a Chile al carro de la 4ta revolución industrial

Nueva área de la cartera que lidera José Ramón Valente está trabajando en innovaciones a la Ley de Investigación y Desarrollo y, en particular, en una nueva ley de ransferencia tecnológica para vincular de mejor forma a las universidades y al área donde se genera conocimiento con los sectores productivos y de las políticas públicas.

Por: Rodolfo Carrasco | Publicado: Lunes 29 de octubre de 2018 a las 04:00 hrs.
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Descubrir nuevas tecnologías, generar nuevos modelos de negocios a partir de ellas y, por esa vía, intentar estar a la vanguardia de la llamada cuarta revolución industrial es la invitación que hace Julio Pertuzé, jefe de la División de Economía del Futuro que creó el titular del ministerio de Economía, José Ramón Valente.

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Ingeniero Civil de Industrias de la Universidad Católica, justamente pasó seis años haciendo investigación como parte de su doctorado en Ingeniería de Sistemas y M.Sc. en Tecnología y Políticas Públicas del Massachusetts Institute of Technology (MIT). Y su visión sobre Chile es favorable: “Ha avanzado mucho como país en el terreno de la innovación, pero eso no opta a que podamos estar mejor”.

Y ante la baja que sugieren “desgraciadamente” las encuestas de la inversión de las empresas en I+D en los últimos años, se pregunta si el instrumento es “malo” o si se está midiendo bien. “Uno hace innovación cuando cambia los procesos, cuando encuentra nuevas formas de llegar a los clientes, no solo cuando crea un nuevo producto (…) A lo mejor, no las estamos capturando en forma correcta. Si uno ve en casos como la venta de Cornershop, esa es una de muchas startup que están tratando de generar innovación, nuevos emprendimientos y se están arriesgando, atreviendo a generar valor”.

- ¿Chile está preparado o consciente de la 4ta revolución industrial?    

- Si estamos preparados o no, la pregunta es comparados con quién, porque si uno mira los ranking de digitalización, de economía digital, dentro de Latinoamérica estamos bien parados, punteamos con Uruguay; la tasa de adopción de tecnología en Chile es alta, lo que indica que existe un sustrato que permite adaptar tecnologías en forma muy rápida y eso es muy bueno.

Ahora, si estamos sacando provecho de todas las oportunidades que da la cuarta revolución industrial, eso todavía no. Si vamos en la senda correcta, sí, vamos avanzando. Hay mucho interés por parte del mercado de entender cómo estas tecnologías pueden ser habilitantes, hay muchas empresas que ya están embarcadas en proyectos de transformación digital y si somos pioneros en eso vamos a tener la tarea resuelta y vamos a poder subirnos al carro de la cuarta revolución industrial y no quedarnos atrás.

Hace 100 años estuvimos a punto de ser desarrollados, pero una tecnología nos dejó fuera del desarrollo: el salitre sintético, eso no nos puede volver a pasar ahora.

- ¿Qué avances hay en estos ocho meses?

- El mandato que tenemos dentro de la unidad es prospectar casos de usos para aquellas tecnologías que puedan ser de propósito general y que puedan llegar a tener un impacto en la economía. Nosotros no tenemos capacidad de ejecutar esas tecnologías, sino que nos interesa ver las tendencias, analizar la tasa de adopción de esas tecnologías en los mercados y estimular a través, por ejemplo, de mesas público y privadas, que se empiece a discutir esto dentro de las empresas.

A principios de año -a propósito de blockchain-, armamos seis mesas de trabajo público y privada para explorar casos de uso de esa tecnología. Más que el Estado ‘venga a decir ocupemos esta tecnología’, lo que hicimos fue hacer la mesa, juntar a los actores y que exploraran ellos cómo esa tecnología podría estar impactando su modelo de negocios.

Así salieron algunas cosas interesantes como las listas de espera AUGE que se pueden montar a través de blockchain, temas de validación de recetas médicas que podrían estar montadas sobre esa plataforma, hay un proyecto andando con el SII para ver cómo podemos tener una trazabilidad de las distintas facturas dentro del mercado. Lo interesante es que ya se gatilló esa conversación.

- ¿En qué otros proyectos se trabaja en esta división?

- Estamos trabajando en distintos proyectos en colaboración con otras divisiones del ministerio. Por ejemplo, con la División de Innovación estamos viendo aportes a la Ley de Investigación y Desarrollo y también estamos trabajando en particular una nueva ley de transferencia tecnológica para poder vincular de mejor forma a las universidades y al área donde se genera conocimiento con los sectores productivos y de las políticas públicas.

En Chile tenemos muy buena ciencia, no son tantos los investigadores, pero los que están son muy productivos y vemos en eso un tremendo potencial para poder impactar a la industria y al sector público que muchas veces han estado trabajando en una lógica de silos distintos y eso estamos tratando de quebrar.

La cuarta revolución industrial es de colaboración, de redes, no es sólo de una tecnología, sino que cómo nosotros, como especie humana, podemos colaborar a una escala nunca antes imaginable. También estamos trabajando un proyecto con la iniciativa científica Mileniun del Ministerio de Economía con Carolina Torrealba para poder tener una política de centros que favorezca el trabajo interdisciplinario y de ciencia colaborativa entre investigadores nacionales.

“Si no fuiste primero, alguien lo hará por ti”

- ¿Cómo se supera el recelo o la falta de confianza a las criptomonedas?       

- Aquí el ministro Valente fue el primero en salir a denunciar el cierre unilateral por parte de los bancos del exchange y él mismo ha dicho que esa no es la forma de poder subirse al carro tecnológico. Insisto en que la peor estrategia que podemos tener como país es esperar que el chaparrón pase, porque si son tecnologías digitales, habrá economías de red y ventajas de ser primeros y si no fuiste primero, alguien lo hará por ti.

Es muy sintomático, es cosa de ver lo que hace Inglaterra, ellos tienen toda una política financiera donde están explorando como las Fintech pueden ser realmente más que una amenaza para la industria financiera. Ellos tienen claro que si no habilitan esa innovación, alguien más lo hará por ellos y el día de mañana toda esa industria desaparecerá como lo hicieron los textiles en Manchester a principios del siglo pasado.

"La astronomía empezará a empujar la frontera del big data"

- ¿Cómo el uso de Big Data ayuda  a un mejor desarrollo de innovación y emprendimiento y que están haciendo al respecto?
- Efectivamente, estamos prospectando usos de técnicas de inteligencia artificial que se nutren o aprenden de grandes volúmenes de datos y en eso nosotros hemos detectado un caso de uso bien excepcional. Chile concentra un 70% de todos los observatorios astronómicos de gran tamaño y están siendo construidos en Chile, y esos observatorios están generando grandes volúmenes de datos.
La astronomía empezará a empujar la frontera del big data y Chile tiene una oportunidad única para posicionarnos como país en la frontera del desarrollo tecnológico y científico en torno a data ciencia.
Para eso uno de los proyectos es cómo podemos articular en un gran data todos los datos de los observatorios, de manera de poder no solo democratizar el acceso a la ciencia, sino que generar también tecnologías de punta que puedan hacer la visualización de esos datos de manera más eficiente y que sirva como un gran laboratorio para poder entrenar a los próximos data sities del país.

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