Estudio revela deterioro en visión sobre derechos laborales y sindicatos

Una caída en la percepción de que en el país se respetan los derechos de los trabajadores reveló el Estudio “Zoom al trabajo”, realizado por la consultora Visión Humana y la Escuela de Psicología de la Universidad Adolfo Ibáñez.

Sólo un 14% de los consultados están “de acuerdo” o “muy de acuerdo” con la afirmación “en Chile se respetan los derechos de los trabajadores”, lo que implica una caída de once puntos porcentuales (pp) respecto a la medición de 2015 (25%).

También un 14% declara estar “muy de acuerdo” o “de acuerdo” con la afirmación “las relaciones laborales entre las empresas y trabajadores son buenas”, lo que también implica un retroceso de once puntos en un año.

Además, en nueve puntos porcentuales se redujo la cantidad de chilenos que considera que los sindicatos aseguran el respeto de los derechos y bienestar de los trabajadores, con un 26% de afirmaciones positivas, frente al 35% de la medición del año pasado.

El director comercial de Visión Humana, Patricio Polizzi, comentó que en Chile “hay una cultura muy individualista todavía, en la cual a los trabajadores chilenos se les ha inculcado que el trabajo y las mejores condiciones laborales se logran solamente de manera individual y, por lo tanto, ahí hay un trabajo cultural importante que hay que hacer para que los sindicatos logren un mejor posicionamiento que el que logran hoy en día”.

Miedo a perder el empleo

Ante la pregunta sobre la probabilidad de perder el empleo, la incertidumbre mostró un importante alza de ocho puntos porcentuales, ya que un 19% dijo no saber o no contestó dicha interrogante.

Asimismo, la cantidad de personas que ve como baja la probabilidad de perder su puesto de trabajo cayó ocho puntos, desde 51% en 2015 a 43% en 2016, mientras que el porcentaje de encuestados que dijo que la probabilidad era “media” subió dos puntos a 32%, y quienes la consideran alta bajó de 8% a 6%.

El decano de la Escuela de Psicología de la UAI, Jorge Sanhueza, reconoció que el estudio se pudo haber visto afectado por los negativos indicadores de desempleo del primer trimestre.

“Cuando las personas están viendo que hay cierta precarización en el entorno económico, cuando hay efectos que de alguna manera inciden en el propio trabajo, las personas trabajan más asustada, con mayores dificultades a poder comprometerse, y de mantienen evaluando cuáles son las mejores alternativas que tienen frente a lo que están”, remarcó.