Líder del comercio chileno llama a mirar los negocios más allá de la “legítima utilidad”

Como una forma de contribuir a recomponer las dañadas confianzas, el presidente de la Cámara Nacional de Comercio (CNC), Manuel Melero, invitó a los empresarios de su sector “a ver los negocios de otra forma”, no sólo buscando una “legítima utilidad”, sino que también la “sustentabilidad de ellos y el apoyo a nuestros públicos relacionados”.

“Esto lo exige hoy la sociedad, pero también estoy convencido que es nuestro deber hacerlo como motores de desarrollo que somos”, recalcó.

El dirigente encabezó anoche la cena anual del gremio, a la cual asistieron representantes de las distintas zonas del país y a quienes llamó a valorar y aprovechar las ventajas que poseen. “El futuro de nuestra expansión económica está en ustedes. La tan necesaria diversificación para hacer frente a los vertiginosos cambios del comercio internacional, y para convertir a nuestro sector turístico en un referente mundial consolidado, requiere del potenciamiento de nuestras regiones. Es por esto que entre todos debemos avanzar decididamente en una mayor regionalización del país, no sólo política, sino también económica”, expuso en su discurso.

Similar protagonismo también incluyó a las Pyme, pues dijo que el desarrollo no sólo depende de las grandes empresas. A este segmento lo conminó a incorporar el comercio electrónico a su quehacer y a atreverse a exportar.

El marco económico

Junto con reiterar su crítica al proyecto que reforma el Sernac, así como la inquietud que le generan al sector la delincuencia y el conflicto de La Araucanía, Melero sostuvo que la recuperación de las confianzas requiere de “señales claras e inequívocas de que el país se rige por un modelo de libre mercado, con las regulaciones necesarias, pero abierto y competitivo tanto a nivel nacional como internacional”.

Acotó que el “inversionista requiere que se resuelva la incertidumbre. Esto pasa por una reforma tributaria que elimine los desincentivos al ahorro y la inversión. También necesita la urgente modernización del Estado, el cual debe transformarse en un real servicio público alineado con las necesidades ciudadanas, a través de, por ejemplo, la eliminación de aquellos trámites que resulten engorrosos para la aprobación de proyectos”.

De igual modo, enfatizó Melero, “es imprescindible para el inversionista el incremento de la competencia en el sistema económico, y la superación de las rigideces del mercado laboral, buscando adaptarse a la realidad contemporánea, donde la tecnología y la innovación irrumpen con fuerza”.