¿Se reducen los conflictos? Huelgas realizadas el año pasado llegaron a mínimos de 2010

2017 fue un año clave en materia laboral: en abril de dicho año, entró en vigencia la Ley que Moderniza las Relaciones Laborales, con la que el gobierno buscaba reducir el nivel de conflictividad en la relación entre empleador y sindicato. Aquello al parecer, por lo menos en las cifras, se habría logrado.

Según información de la Dirección del Trabajo (DT), durante 2017 se aprobaron 721 huelgas legales, las que involucraron a 107.293 trabajadores. Sin embargo, de ese total sólo se ejecutaron 174 paros con 31.799 empleados relacionados. Estos datos son los más bajos desde 2010, año en el que concretaron 134 paralizaciones, las que involucraron a poco más de 18 mil trabajadores.

Los datos también revelan que el sector productivo con la mayor cantidad de movilizaciones fue la industria manufacturera, la cual contó con 33 huelgas efectuadas y 4.070 trabajadores involucrados. En el listado también está transporte, almacenamiento y comunicaciones (con 20 huelgas); le sigue enseñanza (con 18 huelgas) y en cuarto lugar comercio (con 13 paralizaciones).

En 2017 sólo se concretó el 18,5% de las huelgas aprobadas, una de las cifras más baja de los últimos años. Según la DT, en 2016 se concretó el 23,8% de las movilizaciones votadas por los sindicatos,mientras entre 2010 y 2017 los paros efectivamente realizados promedió el 23,24% del total de huelgas aprobadas.

Situación por sectores

El comercio fue el sector que mostró una de las disminuciones más significativa en la cantidad de huelgas efectivamente realizadas, en particular por la cantidad de trabajadores involucrados.

Este sector en 2016 tuvo 19 paros, los que involucraron a 12.821 trabajadores, mientras en 2017 solo hubo 13 huelgas con 1.481 movilizados.

La situación se replica en el sector de intermediación financiera, el cual en 2016 tuvo siete paros con 3.556 trabajadores involucrados. Dicha realidad cambió bastante durante 2017, ya que el año cerró con solo una paralización, en la cual participaron 22 trabajadores.

Esto, según explica el líder de la Cámara Nacional de Comercio (CNC), Manuel Melero, tiene relación con la reforma laboral, tanto con su tramitación como posteriormente con su entrada en vigencia.

“La discusión y promulgación de la reforma anticipó muchas negociaciones colectivas, ese fue un fenómeno que se dio, porque como venía un cambio en la ley laboral muchas empresas se acercaron a los sindicatos y anticiparon las negociaciones. Por otro lado, el carácter de la reforma laboral, al ser mucho más rígida y más compleja de administrar, hizo que las partes se pusieran de acuerdo para no ir a huelga, ya que ninguna de las partes gana”, explica el dirigente.

Por su parte, el exdirector del Trabajo, Marcelo Albornoz, señala que es prematuro atribuir esta variación a la reforma laboral, ya que la nueva legislación ni siquiera cumple su primer año de vigencia.

“No es correcto hacer un comparativo con 7 o 10 años bajo la ley antigua y comparar eso con la reforma. Es absolutamente prematuro, los cambios que puedan existir a lo menos tendremos que esperar un periodo de cuatro o cinco años más, no se puede decir que las huelgas disminuyeron por la reforma”, dice Albornoz.

El abogado de LyD, Sergio Morales, plantea que el hecho que la reforma haya entrado en vigencia el 2017 y el que se mantengan muchos aspectos con poca claridad “han llevado en parte a disminuir la cantidad de huelgas”. Además, “la situación económica, en que se aprecia una desaceleración considerable, lleva a que al no acumularse las utilidades esperadas, los conflictos disminuyan”.

"El dato duro es que bajó ese nivel de conflictividad asociado a los paros"

El director del Trabajo, Christian Melis, analiza la disminución en la cantidad de huelgas efectuadas, y también se refiere a las críticas realizadas al último dictamen que emitió la DT, el cual abordó la utilización de máquinas en las empresas para reemplazar a trabajadores en huelga.

- ¿Disminuyó la conflictividad con la implementación de la reforma laboral?

- Normalmente los datos que uno utiliza para ver los niveles de conflictividad tienen que ver con el número de huelgas efectuadas y aprobadas. Lo que nos empezaron a arrojar las cifras es que la curva de huelgas aprobadas versus las efectuadas bajó notablemente. La cantidad de huelgas que se materializaban bajó en relación a los años anteriores. Una de las cuestiones que está entre medio de esto, es que por la implementación de la reforma algunas negociaciones colectivas se atrasaron, y por lo tanto, obviamente bajó el número de huelgas aprobadas.

- ¿No es solo resultado de la reforma?

- No, pero yo tengo la impresión de que hay algo de eso. Algo hay en términos de reforma porque se entregaron instrumentos y herramientas que mejoraron la posibilidad de acuerdos entre las partes. Ese era uno de los objetivos de la reforma. Tengo la impresión que hay un efecto ley, pero también hay otros factores y que habrá que esperar más tiempo para poder analizarlo. Pero el dato duro es que bajó efectivamente ese nivel de conflictividad asociado a las huelgas efectuadas.

- ¿Qué le parecieron las críticas que surgieron respecto al dictamen de automatización?

- En el dictamen dijimos que la utilización de medios tecnológicos por parte de las empresas que eventualmente pudiesen resultar en el reemplazo de funciones de trabajadores en los procesos productivos, se trata de consideraciones que forman parte de las facultades empresariales y por lo tanto, son lícitas. Pero también en el texto se aclaró que otra cosa es que con ocasión y como respuesta a la huelga legal una empresa utilice medios tecnológicos para sustituir las funciones de las personas en huelga.

- Lo que se critica es la intención...

- El reproche jurídico no tiene que ver con la utilización de medios tecnológicos en sí mismo, si no que cuando son utilizados con ocasión, motivo y como respuesta a la huelga. - Marcelo Albornoz dijo que ese texto refuerza la necesidad de que el próximo ministro del Trabajo revise las interpretaciones de la DT...

- Hasta el momento no he visto una sola crítica jurídica al dictamen. En el caso de Albornoz, él fue director del Trabajo, y que emita un juicio en el que le pide al futuro ministro del Trabajo que enmiende los dictámenes, eso denota un desconocimiento absoluto de la estructura de esta institución. La DT es autónoma, no corresponde que un ministro del Trabajo enmiende o rectifique los dictámenes. El futuro director o directora de la DT podrá ver si modifica o no el criterio jurídico del dictamen. Estoy seguro que el próximo ministro tiene claridad de eso.

- Usted dice que el próximo director del Trabajo puede revisar los dictámenes, ¿le preocupan posibles cambios?

- Cada director tiene la facultad para hacer las interpretaciones que jurídicamente estime pertinentes. Lo que uno espera es que se mantengan los lineamientos generales de estructura interpretativa que se hayan hecho.

- ¿La regulación de los grupos negociadores debería ser por ley o vía administrativa?

- No corresponde a esta institución regularlo, eso corresponde al legislador. No es lícito que el órgano administrativo regule y sustituya la labor del legislador. Por lo tanto, lo que corresponde, y esa es una decisión que tendrán que tomar probablemente las nuevas autoridades, es un proyecto de ley, y que eso se discuta en el Congreso. Regular el tema de los grupos negociadores por la vía de los dictámenes sería un error.