No todo es desaceleración: expectativas salariales en el sector energético volvieron a subir en el II trimestre

No todo es desaceleración en el mercado laboral. De acuerdo a la medición que realiza trimestralmente la consultora DNA Human Capital, los trabajadores que se desempeñan en el sector de la energía en el país bien podrían celebrar.

Desde 2017, de hecho, muestran un alza las expectativas salariales de quienes se desempeñan en el rubro del cual también hacen referencias hoy en el país las extendidas plantas solares y eólicas.

Si hace un año, los aspirantes a cambiarse de trabajo en esta rama de la economía sólo pensaban en mejorar sus remuneraciones en 13%, en el segundo trimestre este número subió a 17%.

Este escenario se condice, como lo explica la directora de DNA Human Capital, Elizaveta Hodireva, con un sector donde se nota movimiento, principalmente por los proyectos de energía renovable, que son proyectos medianos y pequeños de generación distribuida, principalmente de energía solar.

“Hoy la matriz energética chilena demanda energía para sus proyectos por lo cual, esto sigue manteniendo el mercado activo”, explica la ejecutiva.

Y agrega que las iniciativas en marcha se traducen en una mayor demanda de procesos, lo cual se traduce en un aumento de las rentas.

Hodireva señala que el mercado de profesionales en el mundo energético es “bastante pequeño” en el país. De ahí, reflexiona, “las empresas tienen que ir robando profesionales de su competencia o traer gente de afuera, lo que hace también incrementar las rentas”.

Los que bajan

Pero la dinámica de la energía no se repite en otros relevantes del sistema productivo nacional.

En la minería, por ejemplo, los trabajadores se cambiarían de trabajo por un 7% de mejor remuneración, casi lo mismo que hace un año (8%).

“El mercado está bastante quieto”, dice la ejecutiva. Y como se trata de uno de los motores de la economía, subraya que “arrastra otras industrias que son proveedores para la minería”.

Dado lo anterior, advierte que el índice general apunta a un aumento de la renta de 11%, lo que mismo que en el segundo trimestre de 2018.

Y si se debilidad se trata, el análisis de DNA apunta a la industria bancaria, que estuvo “muy detenida” a la luz de fusiones de bancos y reestructuraciones en los meses precedentes.

“Se generaron desvinculaciones masivas, entonces hay más candidatos disponibles en el mercado -que superan la demanda de profesionales-, por lo cual esto hace estancar mucho el mercado a nivel de rentas”, sostiene la directora de DNA Human Capital.

Quien se quiera mover en este sector lo haría por un alza salarial de 7%, mientras que hace un año lo hacía por un 10%.

Este descenso también contagió a la industria del retail, la cual está experimentando cambios. “Las empresas están en el momento de reinventarse. Cómo van a llegar al consumidor, cómo pueden subir las ventas, cómo enfrentan la transformación digital”, dice.

Dado este proceso, grafica Hodireva, muchas compañías de retail están mirando hacia adentro. “No es un momento donde demandan muchos profesionales. Yo diría que hay más salidas que contrataciones, es lo que hace también estancar el mercado de las rentas”, acota.

Todo lo anterior, por lo demás, se da en un marco donde la economía nacional ha exhibido una desaceleración en su ritmo de crecimiento afetada por el deterioro del escenario internacional, que ha tenido en el centro la guerra comercial entre China y Estados Unidos.