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Briones y reforma tributaria: "Convocaremos en los próximos días a una comisión que dibuje la hoja de ruta tributaria"

Por: | Publicado: Viernes 3 de enero de 2020 a las 04:00 hrs.
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Foto: Rodolfo Jara
Foto: Rodolfo Jara

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- ¿Ya se comprometió todo el gasto posible en la agenda social de corto plazo?

- Los números están a la vista. Lo que ha dicho el Consejo Fiscal Asesor, que es una institucionalidad fundamental de la cual somos respetuosos, ha sido bien claro: hoy tenemos una situación fiscal extremadamente exigida, y yo separo aquí la exigencia de corto plazo, que tiene que ver con el plan fiscal para apuntalar el empleo y que va a ser transitorio.

Pero cuando uno ve los números más permanentes, tenemos una situación de déficit fiscal estructural. Para 2022 hemos planteado un déficit estructural de 2% del PIB, similar a lo que existía en 2017, pero muy distinto a la meta original del Gobierno. Por otro lado, en este contexto económico en que los ingresos efectivos están cayendo, tendremos un déficit efectivo superior al 4,5% del PIB en 2020, y eso hay que financiarlo. Eso implica mayor endeudamiento, mayor uso de los fondos soberanos y todos sabemos que esos vehículos de financiamiento son transitorios. Uno no puede hacer uso de la deuda de forma permanente y, por supuesto, tampoco de los ahorros porque se van a acabar.

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Briones destaca el acuerdo logrado con la oposición para allegar nuevos recursos a través de la reforma tributaria, los que representarán cerca de un punto del PIB, que lo califica –dada la coyuntura- como un número "relevante".

"Quiero anunciar que como Gobierno hemos tomado la decisión de convocar en los próximos días a una comisión transversal que se haga cargo de una discusión que permita dibujar la hoja de ruta tributaria de mediano y largo plazo", anticipa.

Precisa que su invitación es a mirar la evidencia de los datos. "¿Qué nos muestran? Que en la medida en que los países se desarrollan, por razones x o y, su carga tributaria crece. Y, en esa lógica, es claro que este país -a medida que se siga desarrollando- tiene que ir aumentando su carga tributaria", subraya.

La pregunta fundamental, reconoce, "es cuánto y en qué gradualidad". Un requisito clave a su juicio es que dicho incremento debe ir de la mano con el crecimiento económico, pues esto permitiría cerrar la brecha de carga tributaria de cinco o seis puntos que tenemos con los países de la OCDE, hoy de unos US$ 15.000.

"Esto en términos simples significa que si usted crece 4% al año, cada cinco años podría subir la carga tributaria en dos puntos del PIB", explica.

Esa referencia para Briones tiene la virtud de entregar una señal de largo plazo acerca de cómo se financiará la agenda social más exigente, da una señal de tranquilidad a los mercados y lleva al país a la cuestión de decidir de dónde sale la plata.

La tarea es compleja, pues hay cambios que técnicamente considera "deseables", pero que desde la economía política son "complicados".

- Políticamente ha sido complicado abordar la renta presunta y el impuesto a los combustibles. ¿Está disponible para dar esas peleas? La llegada de Claudio Agostini como su asesor a Hacienda alentó esas expectativas de que por ahí podría venir un cambio.

- Lo que tenemos en el acuerdo con los senadores es un compromiso de revisar las partidas de gasto tributario, entre las que se incluyen la que usted menciona. Es valioso este trabajo de esta comisión precisamente porque nos van a decir mire, hemos revisado sus planteamientos, los objetivos que tenía son éstos, se están cumpliendo o no, cuál es la mejor evidencia comparada y nuestra recomendación es mantenerla, bajarla o eliminarla.

Eso se transparenta por un tercero imparcial, se da un mensaje al Congreso.

La estructura tributaria va de la mano con esta revisión de cómo vamos subiendo la carga tributaria a medida que el país crece y eso lleva a otras discusiones impopulares, por ejemplo, que el impuesto a la renta hoy lo paga el 20% de los chilenos. En los países que más admiramos, es una proporción significativamente superior, o sea el que empieza a pagar impuesto a la renta allá es sobre una base mucho más amplia. La otra reflexión fundamental, de la mano con esto, es que tenemos que propender a un sistema tributario simple, justo, eficiente y proinversión, porque sin inversión no hay crecimiento económico y sin crecimiento económico la recaudación tributaria es menor, y sin crecimiento económico no hay agenda social reformista, ambiciosa, que se pueda garantizar.

- Ha habido harta presión respecto a acelerar esta agenda y usted se ha cerrado a una segunda reforma tributaria.

- Tenemos la reforma tributaria en los términos acordados, que va a recaudar US$ 2.200 millones en régimen. Hay un pronunciamiento público de los senadores de despachar la reforma en esos términos.

Enseguida viene este informe de revisión de las partidas de gasto, que nos va a mostrar dónde hay espacios en los que se podría avanzar, ya sea en este gobierno o en los que siguen. Y ojalá hacerlo en términos de lo que el acuerdo señalaba, que cuando yo elimine una exención, una parte vaya a arcas fiscales y la otra, a rebajar tasas.

Lo tercero, vamos a impulsar una discusión más de largo plazo, en la cual podamos reflexionar sobre cuáles son las condiciones de borde y cuáles son los criterios con los cuales la carga tributaria tiene que ir subiendo, conforme este país se vaya desarrollando, por un lado; y en segundo término, cuál es la estructura tributaria que debiéramos tener, o sea, qué impuestos vamos a tocar. Porque yo sí coincido en que de una vez por todas deberíamos generar un marco de principios generales sobre los cuales debiera basarse nuestro sistema tributario, porque típicamente siempre hablamos de la carga tributaria, lo que abre espacios de incertidumbre, porque los agentes entienden que al mismo tiempo de abordar la carga van a cambiar la estructura.

- ¿Qué urgencia va a tener ese debate o se van a dar todo el 2020?

- Como señalé anteriormente, en esta comisión que anunciaremos prontamente queremos involucrar al mundo técnico, al mundo técnico de los partidos políticos, de la academia y de personalidades muy valiosas que aporten al debate económico, como expresidentes del Banco Central.

Tenemos que hacer una reflexión valiosa, de largo plazo, que genere una hoja de ruta que sea útil para este país. Hay que pensar en esto en términos de país.

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