Chile recupera cuatro peldaños en ranking de competitividad mundial en la antesala del golpe de la pandemia

En una etapa marcada por el estallido social y a la antesala del efecto más directo del coronavirus, Chile logró un mejor desempeño que el año pasado en el Ránking de Competitividad Mundial elaborado por el Institute for Management Development (IMD) de Suiza y la Facultad de Economía y Negocios (FEN) de la Universidad de Chile.

Tras subir cuatro puestos en relación a la meidición de 2019, el país se ubicó en el lugar número 38 del índice, que mide a un total de 63 países. Sin embargo, y pese a la mejora, Chile no logró recuperar su rendimiento de hace dos años, ya que en 2018 se ubicó en el puesto 35.

Cabe mencionar que para medir la competitividad se ponderan 255 indicadores que contemplan datos estadísticos obtenidos de instituciones mundiales, regionales y locales, además de variables cualitativas obtenidas a partir de una encuesta anual aplicada a ejecutivos y expertos nacionales e internacionales.

Estos elementos son agrupados en cuatro áreas: desempeño económico, eficiencia del gobierno, eficiencia de los negocios y elementos de infraestructura, y en función de su ponderación se calcula la competitividad y la posición en el ránking.

Este año Chile se ubicó en el lugar número 50 en desempeño económico, 20 en eficiencia del gobierno, 37 en eficiencia del mundo privado y 45 en lo relativo a la infraestructura, lo que implicó su ponderación en el ránking.

"Si uno observa los datos con una perspectiva de más largo plazo, se observa que Chile está un tanto estancado en competitividad alrededor del puesto 35 al 40, habiendo estado en algún instante en el Top 20 de naciones más competitivas", dice el informe de análisis elaborado por los académicos Enrique Manzur, Sergio Olavarrieta y Pedro Hidalgo de la FEN.

Chile logró mantener el primer lugar en competitividad en la región, que a nivel general ha experimentado una caída en los últimos 15 años.

Nuevamente, el líder en competitividad global es Singapur, seguido de Dinamarca y luego de Suiza, ambos registrando alzas desde el año previo. Al analizar las economías con menos de 20 millones de habitantes, los tres países se repitieron en los tres primeros lugares.

Principales desafíos
Los académicos de la FEN identificaron cinco principales desafíos para Chile en el año en curso y hacia el futuro, con el objetivo de seguir mejorando en términos de competitividad. En primer lugar, plantean que urge manejar y gestionar los aspectos sanitarios de la pandemia del Covid-19. Luego, dicen que es clave implementar los programas y mecanismos para apoyar a las personas, trabajadores, emprendedores y compañías por los efectos económicos del coronavirus.

Adicionalmente, instan a reestablecer un pacto social para promover la competitividad y el desarrollo, junto con avanzar en la provisión de igualdad de oportunidades. También proponen realizar una reforma del Estado e instituciones de gobierno, que reduzcan la burocracia, promuevan la eficiencia y productividad, y aseguren las inversiones necesarias para el desarrollo de largo plazo y pleno empleo de mejor calidad

Por último, sugieren aumentar la inversión en Investigación y Desarrollo (I+D), promoviendo la colaboración entre universidades y entidades educacionales, empresas privadas, y el sector público.

Los dos primeros desafíos, precisan, tienen que ver con el corto y mediano plazo y cómo sobrellevar las dificultades, sanitarias, económicas y sociales, generadas a partir de la pandemia.

Además, identifican tres áreas de acción claves: descentralización, clarificación y simplificación de las agencias y organismos y profesionalización y planes de largo plazo desvinculados de gobiernos específicos

"De no tomarse estas medidas y acciones de manera más profunda y sistemática, se corre el riesgo que otros países sí lo hagan logren resolver cómo enfrentar e implementar esto cambios, y les permitan en el largo plazo mejorar la calidad de vida de sus habitantes", advierten los expertos.

Los académicos de la Universidad de Chile indican que "Singapur, Corea, Holanda, Alemania y otros países, le han podido dar mejor calidad a sus residentes, porque han logrado resolver algunos de los puzles de la competitividad, no al revés", agregando que "a mayoría de los países que han querido ir por una ruta corta, espontánea, populista, de corto plazo y no de largo alientos, inversión y esfuerzo sistemático, han terminado rápidamente, deteriorando su calidad de vida, y su competitividad".