Comercio golpea la mesa y pide al gobierno definir qué productos "esenciales" podrán comercializarse en medio de las cuarentenas

Continúa el debate sobre los productos que deben ser considerados como "esenciales" de adquirir por los consumidores en medio de la pandemia y las cuarentenas a lo largo del país.

Hoy, la Cámara de Comercio de Santiago (CCS) solicitó al Ejecutivo "poner orden y zanjar" la discusión, la que se ha extendido "por demasiado tiempo, generando incertidumbre y confusión entre los agentes económicos, los consumidores y las propias autoridades fiscalizadoras".

En un comunicado, la entidad liderada por Peter Hill pidió al Presidente de la República, Sebastián Piñera, que encomiende a los ministros de Hacienda, Ignacio Briones y de Economía, Lucas Palacios, resolver el debate sobre el carácter esencial de los productos que puedan comercializarse durante el periodo de restricción de desplazamiento establecido por la autoridad sanitaria.

Hill señaló que "en tiempos de crisis uno de los grandes aportes que puede generar la autoridad es la claridad de las reglas, lo que lamentablemente no ha ocurrido en este caso, en que han primado las contradicciones, incertidumbres y falta de precisión entre las diversas autoridades que se han referido a la materia".

El líder del comercio capitalino calificó como "grave" que la "indefinición" ha permitido que muchas autoridades fiscalizadoras intermedias, alcaldes, inspectores municipales y de salud "interpreten desde sus propias opiniones personales o intuiciones lo que se estima producto esencial, generando amplios márgenes de discrecionalidad y, en muchos casos, arbitrariedad e incluso conductas ilegales".

Hill abordó el debate que se ha generado en el Ejecutivo, que primero habló de un "catálogo" de bienes esenciales, pero luego aclaró que trabajará bajo "criterios" para definir los productos de primera necesidad que puedan comercializarse durante las cuarentenas.

"En la realidad esta indefinición se ha prestado para enormes abusos contra empresas que, con esfuerzo y buena fe, tratan de seguir prestando sus servicios y manteniendo las fuentes de empleo que el país tanto necesita. Un ejemplo de lo anterior fue la decisión de un municipio que cursó una infracción a una tienda que vendía jabones, por contener estos productos un cierto perfume. Tan absurdo es, que a juicio del fiscalizador, si el jabón no hubiera sido perfumado lo habría considerado bien esencial", advirtió el directivo.