Desempleo sorprende a la baja en Santiago pero no cambia negativo escenario del mercado

Los analistas estaban expectantes. El Centro de Microdatos de la Universidad de Chile tenía la oportunidad de ratificar que el mercado laboral ya no resistía la prolongada desaceleración económica.

Para eso, la cifra de desempleo del Gran Santiago de junio tenía que ser muy similar a la de marzo, que encendió todas las alarmas al ubicarse en un 9,4%, el indicador más alto desde marzo de 2010.

Pero nada de eso ocurrió. La desocupación fue de 7,6%, cifra 1,8 puntos inferior en comparación al tercer mes de este año, aunque superior en 1,1% a junio de 2015. Así, el indicador se mantuvo en niveles bajos desde el punto de vista histórico y “relativamente controlado”, según expresó el director de Microdatos de la U. de Chile, Jaime Ruiz-Tagle.

En números, 242.400 personas están desocupadas en el Gran Santiago.

La tasa de 7,6% es concordante con el último reporte de desocupación del INE (de 6,8% para el trimestre marzo-mayo) y con las proyecciones del mercado para el cierre del año.

Según explicó Ruiz-Tagle, el aumento del desempleo en término anuales se debe al incremento de la fuerza de trabajo (2,2%) y del empleo (0,9%), que revierte la tendencia negativa de diciembre de 2015 y marzo de este año. En términos trimestrales, la caída de 1,8 puntos obedece, a juicio del economista, a que “las empresas realizaron en marzo los ajustes que estaban conteniendo desde 2015”.

Los sectores con las mayores tasas de censatía son Construcción (11,5%), Servicios Personales y de Hogares (7,9%) y Comercio con Transporte, ambos con 7,2%. El empleo asalariado aumentó un 4,4% en doce meses, mientras que el trabajo por cuenta propia cayó un 9,8%.

Estimaciones inalterables

No sólo el “ajuste contenido” que argumentó Ruiz-Tagle explicó el notorio aumento del desempleo en el Gran Santiago en marzo, acompañado de una marcada caída en junio.También la volatilidad propia de la encuesta de Microdatos de la U. de Chile y algunos fenómenos transitorios, como ajustes en el empleo fiscal y otras industrias, según concordaron los agentes del mercado, que mantuvieron inalterables sus proyecciones de desempleo para este año.

“La acotada creación de empleos evidencia un mercado laboral bien desacelerado”, afirmó Felipe Ruiz, de BCI Estudios, quien mantuvo en 7,6% la desocupación al cierre de 2016.

También entre 7% y 8% fue la estimación de Aníbal Alarcón, economista de BBVA Research, quien puntualizó que los incrementos en el desempleo “afectarán mayormente a los trabajadores de bajos ingresos”.

No sólo eso, “el ciclo de desempleo será más prolongado que en otras oportunidades”, vaticinó Benjamín Sierra, economista de Scotiabank Chile, quien proyectó una tasa de desocupación de 6,6% para el cierre de 2016. El economista de Banchile Inversiones, Nathan Pincheira, sintonizó, pronosticando una cifra de desempleo de 6,8% promedio para el año.

Gobierno destacó la reducción del desempleo

El ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, calificó como “una buena noticia” la caída del desempleo en el Gran Santiago, desde el 9,4% de marzo al 7,6% de junio. “El mercado laboral ha sorteado bastante bien la desaceleración”, sostuvo el secretario de Estado.

David Bravo cree que se cometieron errores en la medición de marzo

El "ajuste contenido", los efectos transitorios o la volatilidad propia de la encuesta de desempleo del Centro de Microdatos de la Universidad de Chile, no convencen al ex director del organismo de investigación y actual director del Centro de Encuestas y Estudios Longitudinales de la Universidad Católica, David Bravo, quien cuestionó la metodología de los datos presentados en marzo, cuando la tasa de desocupación se ubicó en 9,4%.

"Fue ruido estadístico y eso puede ser error muestral, aunque tiendo a pensar que es más un error no muestral que tiene que ver con trabajo en terreno", sostuvo el economista, quien agregó que "en marzo, el empleo asalariado cayó un 3,6% al año, lo que empujó el alza del desempleo. Sin embargo, los cotizantes del sistema de pensiones y seguro de cesantía subieron en 1,5% y 2%".

Para disipar dudas, Bravo señaló que el único camino es que la Universidad de Chile facilite los indicadores metodológicos del trabajo en terreno, "como las tasas de respuesta, de contacto y de rechazo, en forma trimestral".

Eso, según el experto, "permitiría analizar si es que efectivamente marzo fue un mes especial, porque a lo mejor hubo un particular problema en el trabajo en terreno que tal vez debió haberse controlado antes de entregar los datos".

El economista aseguró que los datos de marzo "no fueron fidedignos" y que "en junio hay un empeoramiento en el mercado laboral, aunque más acotado".

Microdatos se defiende

El director de Microdatos de la U. de Chile, Jaime Ruiz-Tagle, descartó problemas metodológicos, asegurando que si bien "todas las estadísticas están sujetas a error muestral y no muestral, no tienen motivos para pensar que hay otro problema". Además, recordó que "históricamente en marzo hay un aumento del desempleo, seguido de junio con niveles no tan altos".

Independiente de la polémica, Ruiz-Tagle sostuvo que "es difícil volver a tasas de desempleo del 6% y que lo más probable es que el indicador se estacione cerca del 7% durante el resto del año.