El recorte de la proyección para la inflación a finales de año de 2,9% a 2,3% fue la mayor sorpresa que identificaron en el primer Informe de Política Monetaria (IPoM) de 2018 los economistas. En esa línea, los principales impactos respecto a sus cálculos particulares apuntaron al momento que elegirá el Banco Central para iniciar el proceso de normalización monetaria elevando la tasa de interés.

Esto, ya que de acuerdo al IPoM de diciembre, el supuesto de trabajo del instituto emisor era que ello partía en el segundo semestre de este año, mientras que en el publicado ayer se limitó a señalar que se concretará a medida que “las condiciones macroeconómicas vayan consolidando la convergencia de la inflación hacia 3%”, sin hacer referencia a una fecha explícita.

Y en un contexto de recuperación de la actividad y una inflación que se mantendría baja en gran parte del año, la tasa de interés se quedaría en el 2,5% actual por varios meses. “Los recortes de tasas son poco probables, pero no hay apuro para subir la TPM. Por lo tanto, no esperamos que el ciclo de ajuste comience antes del primer trimestre de 2019”, indicó el economista jefe de Itaú, Miguel Ricaurte.

“El inicio del proceso de alza de tasas –que nosotros estimábamos podría ocurrir en el último trimestre del año– se retrasaría hasta inicios de 2019”, coincide Banco Santander. Y añade que que si se da el escenario de baja inflación para el corto plazo planteado en el IPoM, “hay un importante riesgo para la convergencia de la inflación a la meta en 2019”.

Desde BBVA Research, departamento de Estudios liderado por el economista Jorge Selaive, agregan que hay un riesgo de cara a la eventual alza de la TPM: el ajuste fiscal anunciado por el ministro de Hacienda, Felipe Larraín.

Esto, porque no estaría considerado en el escenario base del Central y lo que podría restar dinamismo a la actividad, “particularmente en consumo público pues vemos que los recortes se focalizarán en gasto corriente”.

Desde Scotiabank, el economista Benjamín Sierra plantea que el nuevo escenario reduce bastante la probabilidad de un recorte de la tasa referencial en junio, como lo estimaban a partir de las cifras previas. “La primera alza de este ciclo queda postergada para la reunión de septiembre, con una probabilidad de no más de 60%. Un alza en diciembre tiene una probabilidad mayor de ocurrencia”, dice.

Mayor PIB en línea

Sobre el alza de 50 puntos base en el rango de crecimiento para este año a 3% y 4%, la mayoría de los agentes lo asumió en línea con sus expectativas. “No vemos en los cambios efectuados en el presente IPoM un factor relevante que genere modificaciones a nuestra visión”, plantearon desde BICE Inversiones, que ratificó su pronóstico de 3,7% para el PIB de este año.

Sin embargo, sí hubo reparos a la estimación entre 3,25% y 4,25% para la expansión del Producto esperada para 2019. Banchile Inversiones expuso que tanto las mayores tasas de interés en el mundo desarrollado, como la ausencia de la exigua base de comparación minera y los menores precios del cobre, “harán difícil que el crecimiento de 2019 supere al de este año”.

Ministro de Hacienda, Felipe Larraín (foto de Rodolfo Jara)

Larraín y Valente destacaron la mejoría en pronósticos del instituto emisor

Economía reiteró la meta de que la inversión crezca entre 6% y 7%.

Una positiva evaluación de las proyecciones realizadas por el consejo del Banco Central en materia de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) y de inversión hizo el equipo económico de gobierno.

"En diciembre dijimos que creíamos que con las nuevas condiciones de liderazgo del presidente Piñera y las mejores perspectivas en el mercado internacional se podía crecer en torno a 3,5% y eso lo ha corroborado el Banco Central", enfatizó el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, ante los positivos resultados que reveló el Informe de Política Monetaria (IPoM) el día de ayer.

El jefe de las finanzas públicas del país agregó que incluso el Banco Central aumentó sus perspectivas de crecimiento para este año. "Si en el último informe presentado en diciembre proyectaba que el PIB para el 2018 crecería en el rango entre 2,5 y 3,5%, en su última versión estimó que el PIB total crecerá entre 3,0 y 4,0% este año", señaló Larraín.

El ministro de Economía, José Ramón Valente, también admitió su satisfacción con el panorama más auspicioso expuestos por el instituto emisor.

El personero admitió estar "contento" de ver que se avanza hasta la meta de un aumento de la inversión de "6%- 7%" que se propusieron en este administración.

"El Banco Central nos informó que la inversión para el 2018 ha subido en términos de su proyección desde 3,1% hasta 3,6% y que el 2019 y 2020 podría estar en torno a 4%", resaltó Valente.

Además, indicó que si bien "todavía no llegamos a esa cifra", van bien encaminados y esperan poder tener ese "shock" de inversión a fin de aspirar a cifras mayores a las que ha puesto la entidad emisora. Eso sí, fue enfático en señalar que es necesario llegar a ese 7% para cumplir con las proyecciones dadas para los próximos dos años.

Para lograrlo, comentó que se han reunido con varias instituciones, desde empresas hasta gremios para ver "cuál es la posibilidad de que eso efectivamente se materialice".

El PIB cerró 2017 con una expansión de 1,5%, lo que se tradujo en un resultado de apenas 1,7% para todo el período del gobierno de Bachelet; mientras la inversión cayó 1,1%, completando cuatro años consecutivos de disminuciones.

José Ramón Valente, Ministro de Economía, Fomento y Turismo (foto de Rodolfo Jara)