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Leonardo Suárez: “En este gobierno no veo espacio para recuperar la clasificación de riesgo”

Economista prevé una expansión de 4% para este año y el próximo, pero advierte una leve desaceleración de la actividad en la segunda parte de este año. Ve el dólar corrigiéndose hacia los $ 600 a diciembre.

Por: Sebastián Valdenegro | Publicado: Lunes 30 de julio de 2018 a las 04:00 hrs.
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Si hay algo que caracteriza a Leonardo Suárez, es que no tiene pelos en la lengua y dice lo que piensa. Muchas veces va contra la corriente en materia de proyecciones económicas... y no han sido pocas las oportunidades en que acertó.

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Hace dos semanas, el director de Estudios de LarrainVial escribió un informe en el que anticipaba una corrección del dólar -que en ese momento estaba cerca de $ 670- hacia niveles cercanos a $ 600 para diciembre, mientras que proyectó un valor del cobre recuperando la barrera de US$ 3 por libra este año. Tanto la divisa como el metal rojo han comenzado una senda correctiva que, al menos preliminarmente, pareciera darle la razón.

- ¿Cómo ve el escenario en Chile?

- Sigo sosteniendo que creceremos un 4% este año y el próximo, aunque estoy un poco más cauto para 2019 ya que reduje mi proyección desde 4,5%. Al final, el principal driver de la economía chilena son los shocks externos. El mundo se quedará un poco menos abierto después de la guerra comercial, tendrá efectos de largo plazo. Ese es el principal riesgo que hay en el panorama externo.

- ¿Que haya un mundo menos abierto nos debiera pegar fuerte?

- Claro, los problemas se van a dar sobre todo en Europa y Estados Unidos. Pero por otro lado, hay una trayectoria descendente del dólar en el mundo que, en la medida que se mantenga, es bueno para Chile. ¿Por qué? Porque es bueno para su demanda interna, la apreciación del peso es expansiva.

- ¿Cuán sostenible es el crecimiento sobre 4% que vemos hoy?

- El primer semestre Chile va a crecer 4,7%, lo que significa un 4% en el primer trimestre y 5,5% en el segundo. Pero a partir del tercer trimestre hay un tema de base y habrá una desaceleración. Hay algunos indicadores que anticipan que la economía crecerá un 3,3% este segundo semestre, por lo que habrá una desaceleración en el transcurso del año. Pero no será una desaceleración complicada.

- ¿Esto puede atrasar el alza de la tasa?

- El Banco Central está hoy con mayor disposición a subir la tasa desde fines de año. Yo creo que la subirá a fin de año. La única razón para que no la subiera sería que se profundice aún más la guerra comercial, pero no es mi escenario base.

- ¿Cuánto golpearán a las expectativas la baja en la clasificación?

- No mucho. De partida, el recorte era esperado, Moody´s tenía outlook “negativo” y es una clasificadora que ve los fundamentales más a largo plazo, no se deja impresionar por la mejora cíclica de la economía. La deuda pública llegó a 25% del PIB y en términos normales era menos de 12% del PIB y Moody´s no ve cómo eso se va a reducir.

Yo creo que las clasificadoras en general fueron muy pro cíclicas y se subieron al carro de la victoria con el súper ciclo y el alza del precio del cobre, y después se dieron cuenta de que Chile no era capaz de crecer con el cobre a US$ 2 la libra. Cuando Chile aprenda a crecer 4% con el precio del cobre a US$ 2, ese día las clasificadoras pensarán nuevamente en subir la clasificación.

- ¿Se ve probable eso?

- Falta mucho para eso… En este gobierno no veo ningún espacio para recuperar la clasificación de riesgo.

- ¿Ni siquiera al final del gobierno, como plantea el ministro Larraín?

- No. Él habla de reducir el balance estructural en 0,2 punto por año, lo cual veo probable. Pero digamos las cosas como son: la primera administración de la presidenta Bachelet, con Andrés Velasco en Hacienda y Alberto Arenas en la Dipres, incrementó el gasto público en un 80% nominal y llevó el gasto público del 17,5% al 23% del PIB en 4 años. La primera administración de Piñera lo bajó muy poco y ahora subió porque la reforma tributaria está recaudando 1,5% del PIB en lugar de 3%. Con Rodrigo Valdés se moderó en algo la expansión fiscal, pero los niveles quedaron muy altos.

- ¿Son suficientes los esfuerzos fiscales que ha realizado Hacienda?

- No, el problema es que Chile estuvo acostumbrado por mucho tiempo a tener superávit fiscales, hasta 2008. Entonces, esta situación de un déficit bajo pero persistente y crónico no es algo a lo que estamos acostumbrados. Ahora, la tendencia tocó techo porque comenzó a recuperarse el precio del cobre y, consecuentemente, el crecimiento económico.

Dicho eso, diría que estamos en una situación que hay que manejar y gestionar. Pero no es algo dramático para compararnos con Brasil u otros países. Al final del día, el déficit fiscal de Chile es de nivel de país desarrollado, pero en el pasado lo compensábamos con mayor crecimiento potencial. Si queremos recuperar la clasificación de riesgo, hay que tomar medidas para recuperar el crecimiento de largo plazo, que yo veo que puede recuperarse a un 3,5%.

- ¿Qué debiera hacer el gobierno para mejorar la nota crediticia?

- Antes que mejorar la clasificación de riesgo, sería esperable que la administración Piñera se la juegue por recuperar reglas claras para la inversión e incrementar el crecimiento potencial, de tal forma que seamos menos sensibles a los shocks externos. Es políticamente difícil, pero es el objetivo de un gobierno promercado. El upgrade vendría solo si se logra este objetivo.

- ¿Cómo ha visto los primeros cuatro meses del gobierno?

- La verdad sea dicha: las expectativas estaban demasiado infladas. El gobierno no tiene mayoría y eso va a significar que solo va a aprobar proyectos que generen consenso, no los que necesita el mercado.

Para proyectos más complejos desde el punto de vista político, como la reforma previsional o la tributaria, se necesitará apoyo del Congreso. Si se lanza hoy una reforma tributaria o previsional, lo único que se logrará será reunificar a la oposición que hoy es una diáspora.

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Escenario externo: "Tendremos el cobre en US$ 3,6 por libra el próximo año"

- ¿Cómo ve el escenario externo?
- La guerra comercial ha sido un tema. Chile se ha beneficiado de la apertura comercial y el crecimiento de los países emergentes está vinculado muy directamente a la economía mundial y a la apertura del comercio exterior. Eso se refleja en que si los países emergentes crecen más que los desarrollados, entre otras cosas, es porque el volumen de comercio exterior crece más.
En ese contexto, evidentemente que si hay más cerraduras en la economía, por supuesto habrá menos crecimiento en los países emergentes y menos crecimiento de la demanda por commodities.
Dicho todo esto, el gran mito es que las exportaciones chinas serán las más afectadas en esta situación, y la verdad es que los números reflejan que no es así. China depende más de su demanda interna y hoy es el "dragón que se está tragando al mundo", no es "la fábrica del mundo". El 85% del cobre que consumen los chinos se destina a la demanda interna. Por eso estamos confiados en que el precio del cobre tiene un piso. Va a volver sobre US$ 3 la libra pronto. Estoy cautelosamente optimista para el próximo año y tendremos el cobre en US$ 3,6 por libra.
- ¿La guerra comercial va a afectar más a Estados Unidos que a China?
- Esa es mi hipótesis, que EEUU y los países desarrollados de Europa serán más afectados. Evidentemente, en una perspectiva global, el cobre depende de un balance entre oferta y demanda. Si hay menos crecimiento global, va a significar menos demanda por cobre, pero al mismo tiempo habrá menos oferta. Si uno mete todo en la juguera a nivel neto, creo que el balance seguirá siendo deficitario con menos oferta y demanda, al revés de lo que estima hoy el consenso.
Ahora, si la guerra comercial llega a niveles extremos o hay una crisis financiera en China, ese es otro cuento...
- Pero no es el escenario base...
- No. El otro riesgo presente, pero que es cada vez menos probable, es una escalada de tasas en Estados Unidos. Creo que a la Fed le quedan dos alzas de tasas adicionales y el hecho de que la tasa del bono del Tesoro sea incapaz de sostenerse sobre el 3% da esa señal. El aplanamiento de la curva quizás anticipa que a partir del segundo semestre vendría una desaceleración de la economía norteamericana.
- ¿Continuará la corrección del dólar?
- Sí, veo que cerrará este año y el próximo en torno a $ 600. El dólar se deslizaría por un tobogán, con una "trayectoria de serrucho", con mucha volatilidad. Esa tendencia se producirá en la medida que China salga a rescatar a los commodities y que el cobre vuelva por encima de los US$ 3 la libra.

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