Secretario general de Amplitud renuncia a la directiva

El secretario general de Amplitud, diputado Pedro Browne, renunció el pasado lunes a la mesa del partido encabezado por la senadora Lily Pérez, desatando con ello dudas respecto de la posición de la tienda en cuanto a la carrera presidencial que deberá decidir la novel colectividad el próximo 26 de noviembre en su consejo general.

Junto al parlamentario dimitió también el primer vicepresidente, cercano a Browne, Cristóbal Saavedra, y ambos fueron reemplazados de inmediato. Lo más llamativo del caso es el reemplazante del secretario general, pues asumió Carlos Lobos, ex subdirector del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes del gobierno de Sebastián Piñera.

Estos no son los primeros conflictos al interior del joven partido, los roces más notorios se produjeron a raíz de la decisión, inconsulta dicen algunos, de respaldar al alcalde electo por Santiago, Felipe Alessandri, ya que con ello se rompió uno de los manifiestos de la tienda cuando fue creada y es que no respaldarían a candidatos de ninguna de las dos grandes coaliciones.

La salida de Browne de la directiva da cuenta de las diferencias que ya cruzan la colectividad, fundada sólo el 7 de enero de 2014 tras la escisión de RN de un pequeño grupo contrario a las políticas del entonces timonel Carlos Larraín, y que ha generado un reducido éxodo de militantes, lo que tiene que ver -según plantean en la tienda- con las decisiones que se deben tomar en materia presidencial y con las señales que se han dado en ese sentido.

El sábado 26 de noviembre Amplitud realizará el Consejo General en el que debe elegir al abanderado presidencial. Sin embargo, en el partido comentan que las señales que se están dando es que en esa instancia “podría darse el peor de los escenarios y es que se termine proclamando a Piñera como nuestro candidato presidencial”, comenta una fuente interna. Ello, pese a que siempre se dijo que el partido aspiraba a tener su propio aspirante a La Moneda. De todo esto se responsabiliza a la presidenta de Amplitud, senadora Lily Pérez, quien no quiso conversar con DF.