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Bloom de algas: mortalidad de salmones llega a 2.450 toneladas

Parte de esta biomasa ha sido trasladada a plantas productoras de harina.

Por: | Publicado: Miércoles 14 de febrero de 2018 a las 04:00 hrs.
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En un total de 2.450 toneladas se calculó la mortalidad que ha producido hasta el momento el fenómeno del bloom de algas nocivas que está afectando a la industria salmonera entre las regiones de Los Lagos, Aysén y Magallanes, lo que da muestras de un fenómeno mucho más controlado que en 2016.

De acuerdo al informe preliminar del Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura, (Sernapesca), la cifra se da luego de catastrar 82 centros de cultivo afectados.

Si bien la situación ha encendido las alertas de la industria, el fenómeno ha avanzado con mucha menos fuerza con respecto de la crisis de 2016, que produjo pérdidas por 40.000 toneladas.

De acuerdo a SalmonChile, desde el comienzo del evento la mortalidad entre Aysén y el sur de Los Lagos han representado 0,9% de la biomasa en el agua.

“Aun las mortalidades están dentro de lo normal para un verano. Las empresas de SalmonChile han realizado un trabajo oportuno y coordinado para manejar este Bloom de algas”, manifestó el presidente del gremio, Arturo Clément.

A la fecha, algunas de las empresas afectadas ya han cuantificado sus pérdidas.

La primera en hacerlo fue Invermar, que informó el lunes haber registrado pérdidas por US$ 8,25 millones, tras perder 1.600 toneladas de salmón.

AquaChile informó que de las 42 mil toneladas de peces que mantienen en sus centros de producción -que valoró en US$ 167 millones-, la pérdida por mortalidad producto de las algas en sus centros Mauchil y Punta Porvenir, ha representado solo 0,64% del total de las toneladas de biomasa en cultivo.

Plan de control

De acuerdo con el informe de Sernapesca, toda la mortalidad producida por el fenómeno ha sido derivada a plantas reductoras de harina de pescado, dispuesta en ensilaje o enviada a vertederos autorizados.

En el caso de Los Lagos, la totalidad de la mortalidad se envió a plantas reductoras.

En Aysén, 70% de los salmones se enviaron a plantas reductoras en Castro y Calbuco, y el 30% restante a vertederos en tierra.

En Magallanes, la mortalidad fue transportada a Los Lagos y enviada a vertederos.

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