Actualidad

Los retos empresariales para lograr una gestión sostenible del agua

Hay firmas que han definido una ruta con miras hacia una gestión sostenible y eficiente de los recursos hídricos.

Por: Gonzalo Díaz Moya | Publicado: Miércoles 27 de diciembre de 2017 a las 04:00 hrs.
  • T+
  • T-

Compartir

Según cifras 2016 de la Dirección General de Aguas (DGA) del Ministerio de Obras Públicas, el sector productivo que demandó mayor consumo de agua a nivel nacional fue el agropecuario con un 82%, luego el sanitario (agua potable) un 8%, el industrial un 7% y por último el minero con un 3%.

Muchas empresas son conscientes del actual escenario que enfrenta este elemento en el planeta, con un cambio climático que genera incertidumbre a diario. Por ello, hay firmas que han definido una ruta con miras hacia una gestión sostenible y eficiente de los recursos hídricos, implementado diversas estrategias que permitan cumplir dichos fines.

Desde Aguas Andinas -como principal proveedor de agua potable de la Región Metropolitana (RM)- comentan que su preocupación por la gestión sostenible del agua es doble, tanto desde el punto de vista de sus operaciones y como del uso que realizan sus clientes.

Su director de Operaciones, Manuel Baurier, declara que desde el manejo y utilización de las fuentes de agua hasta la reutilización o disposición de desechos, buscan la eficiencia, minimizar los impactos ambientales negativos y promover la innovación para reducir su huella ambiental.

Por su parte, la gerente de Personas y Sustentabilidad de CAP, María Elena Sanz, señala que en la compañía se busca optimizar el reuso y la recirculación del agua, además de la reducción de las pérdidas dentro de las operaciones industriales, además de minimizar todos los consumos a partir de operaciones eficientes.

Para Colbún, en tanto, según explica su gerente de la División Desarrollo Sustentable, Juan Pablo Schaeffer, una gestión responsable del recurso hídrico es clave para el desarrollo de su negocio, considerando que cerca del 50% de su capacidad instalada corresponde a centrales hidroeléctricas, a la vez que las centrales térmicas utilizan aguas para su operación.

Ahorro y reutilización del agua

El proyecto más relevante de Aguas Andinas es el de incrementar el rendimiento de la red de distribución, con un plan de eficiencia hidráulica que busca recuperar más de 70 millones de metros cúbicos de agua potable anuales. El plan es multianual y espera llegar a un 80% de rendimiento técnico en 2022.

“Desde el punto de vista del servicio que prestamos, depuramos las aguas servidas de la RM y recuperamos 536 millones de metros cúbicos de agua para nuevos usos. Hoy, esos recursos se devuelven a cauces naturales, su reutilización no es deliberada, pero en el futuro es posible planificar su destino para uso en la agricultura, industria, recarga de acuíferos o su repotabilización para consumo humano”, enfatiza Baurier.

Desde CAP, Sanz dice que hay iniciativas en cada de unas de las empresas del grupo para la reducción del uso del agua. En el caso de CAP Minería -con índices de uso de agua de unos 600 litros por tonelada de mineral en una operación como Cerro Negro Norte- está la recuperación de agua en el proceso de espesadores de relaves.

“Una gran medida de CAP Minería, que hemos tenido en términos de uso de agua y la eficiencia, es el hecho de fabricar agua en la faena de Copiapó. Toda el agua que se consume es fabricada a partir del agua de mar. La expectativa es que los nuevos proyectos mineros utilicen agua desalinizada”, destaca la ejecutiva.

Desde Colbún, Schaeffer sostiene que la visión que tiene la compañía respecto de la gestión sostenible del agua se traduce en diferentes programas, tales como el Convenio Marco Colbún y Asociación de Regantes Maule Sur, Planta Depuradora de Agua Nehuenco, Centrales en serie Hidráulica y el uso eficiente de agua de regadío.

El ejecutivo comenta que desde 2011 la compañía informa su huella hídrica, donde además de calcular y reportar los consumos anuales, se realiza un análisis del nivel de estrés hídrico al que se exponen sus instalaciones.

En 2016, el agua dulce consumida por la empresa en sus operaciones alcanzó a 4.846.819 metros cúbicos. Esta agua no es la utilizada en la generación hidroeléctrica, ya que esa es utilizada y devuelta íntegramente, sin ser consumida, añade Schaeffer.

De este modo y sin duda alguna, uno de los grandes desafíos que enfrentan las compañías en Chile -en un contexto de cambio climático- es la gestión sostenible del recurso hídrico. Aquí la optimización del uso del agua es esencial, a través de acciones como su ahorro y reutilización.

Al parecer, la introducción de mejores tecnologías e innovación permiten lograr eficiencia en los procesos productivos, que finalmente reducirán los impactos ambientales que se pudiesen generar producto de las propias operaciones de las empresas.

Lo más leído