Hacienda defiende proyecto de Ley de Bancos y aclara que no busca “facilitarle la vida” al sector

Antes de ingresar al salón donde haría uno de los anuncios más esperados del ChileDay 2016, el ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, y el presidente de la Asociación de Bancos (ABIF), Segismundo Schulin-Zeuthen, conversaban animadamente.

Esto hasta que llegó el momento de comenzar con la novena versión del encuentro público privado, y el ministro subió al estrado y tomó la palabra, como estaba contemplado.

Esto, para presentar el proyecto de la nueva Ley General de Bancos (LGB), que considera una transición de seis años hacia los requerimientos de capital internacionales de Basilea III, para así lograr un sistema financiero “más robusto”.

Ya no tan sonrientes

Pero uno de los puntos que generaba mayor expectación era el de los cambios a la estructura de la Superintendencia de Bancos (SBIF).

Esto porque en varias ocasiones,los principales ejecutivos del sector se han mostrado partidarios de que el regulador sea independiente del ciclo político, elegido por Alta Dirección Pública (ADP), y que tenga un gobierno corporativo similar al del Banco Central, que cuenta con un consejo y no depende de una sola persona. Es decir, que pase de unipersonal, a colegiado.

Sin embargo, los rostros de decepción no se pudieron disimular, luego de que se informara que la opción elegida fue la de una autoridad unipersonal, similar a la del actual superintendente, aunque si será por ADP, por un período fijo.

Al término del encuentro, quien tomó la palabra fue, justamente, quien antes había compartido relajadamente con Valdés: el presidente de la ABIF.

Y saliendo de su tradicional estilo calmo, se fue en picada en contra del anuncio. “Ésta es una mala noticia para la banca”, señaló, en referencia a la elección de gobierno corporativo del fiscalizador.

“Lo positivo es que realmente vamos a avanzar hacia Basilea III, y lo que es realmente preocupante, y una mala noticia para la banca, es el que se haya optado por una autoridad unipersonal y eso es difícil de entender, y el ministro (Valdés) supongo que en algún momento explicará el porqué”, agregó.

“No es para facilitarle la vida a los bancos”

La respuesta de Valdés tampoco se hizo esperar, saliendo momentos después a defender la iniciativa. “Sinceramente, esperaba que no le gustara a los bancos”, y luego golpeó la mesa. “Esto no es para facilitarle la vida a los bancos, es para que tengamos una buena legislación”, dijo enfático.

Luego, el secretario de Estado explicó que la figura de un comité “está dado por el Banco Central, que es el organismo que le solicita los chequeos y balances al superintendente. Si se dejara todo el poder radicado en la superintendencia, tendría toda la razón el presidente de la Asociación de Bancos en que sería demasiado poder para una persona”.

De todas formas, después se mostró abierto a que los empresarios participen del debate y aclaró que se tomará el tiempo necesario que requiera el proyecto ya que estima que “hay que hacerlo bien más que rápido”.

Los cambios

Autoridad unipersonal
Nombramiento del superintendente será realizado por el presidente mediante mecanismo de ADP, por un período fijo. Su remoción será por resolución fundada y en base a causales establecidas en la ley.

Personal de la SBIF
Primer y segundo nivel jerárquico en primeros tres meses tras dejar el cargo no podrán trabajar en ninguna institución fiscalizada por la SBIF ni empresas relacionadas y recibirán una remuneración del 75% del sueldo. Los siguientes tres meses continúa restricción pero sin pago de sueldo. Los siguientes 6 meses deberán informar activamente a la SBIF.

Protección legal
Se extiende a los funcionarios de la SBIF y aquellas personas contratadas por la SBIF que formen parte de los procesos de sanción.

Banco Central
Se fortalecen los contrapesos en materias de Basilea III y resolución bancaria.