MOP se niega a compensar a Astaldi por Embalse Punilla: acusa que monto es "excesivo, especulativo y temerario"

La mermada situación financiera de Astaldi –que salió hace unos meses de una reorganización de sus deudas en el país, como parte de una situación global- fue el argumento central del Ministerio de Obras Públicas para oponerse a la solicitud de compensaciones por hasta US$ 170 millones que pidió la italiana para el Embalse Punilla, en la región de Ñuble.

El conflicto se desató el 20 de junio, cuando Astaldi presentó un requerimiento al Panel Técnico de Concesiones, organismo que recomienda soluciones a conflictos en el sector, dado que los estudios de ingeniería del futuro embalse mostraban que habrá 10% menos de capacidad de almacenamiento que los 625 Hm3 planificados en las bases de licitación.

En 28 páginas, el MOP mostró una dura estrategia contra la concesionaria. “No es irracional que esta discrepancia busque ser una excusa frente a la imposibilidad de cumplir la obligación de enterar el 10 de agosto de 2019 $ 32.000 millones del capital de la concesionaria”, dijo aludiendo a que la sociedad se formó con un capital total de $ 40.000 millones.

“Obviamente las obras del Embalse Punilla se han visto afectadas por la situación financiera del grupo empresarial”, reclacó.

El Embalse Punilla fue adjudicado en 2016 a la italiana y busca levantar una presa en el río Ñuble con un muro de 137 metros y una capacidad de almacenamiento total de 625 millones de metros cúbicos (m3). El presupuesto total llegaba a unos US$ 259 millones (UF 9.410.000, al tipo de cambio de hoy), donde el 67% es subsidio estatal. Astaldi pide hasta UF 4.163.641.

Es un monto “manifiestamente excesivo, especulativo y temerario considerando el presupuesto oficial de la obra, cuyo objeto central es el servicio de riego”, recalcó el MOP.

No pone en peligro el objetivo principal

Respecto al tema de fondo, el MOP no cuestiona que el embalse podría soportar una menor capacidad del recurso hídrico, llegando solo a 563,9 Hm3 como dice la italiana, pero argumenta que esto no cambia las condiciones de las bases, por cuanto la cifra original era una estimación y, además, que el nuevo volúmen no influye mayormente en la operación.

Esta “diferencia en la capacidad del embalse no afecta la prestación de los servicios básicos, como erradamente sostiene la concesionaria, y por ende no se vería comprometida la seguridad de riego”, recalcó.

Reletó que el 6 de septiembre de 2018, Astaldi les envió una carta dando a conocer estos problemas, pero llamó la atención de que la empresa contara con los estudios que mostraban esa situación desde hacía un año antes.

“Independiente a la oportunidad de las observaciones, lo realmente relevante es que la concesionaria en la primera versión del proyecto de ingeniería de detalle del embalse de marzo de 2018, presentó un diseño que consideró la capacidad de almacenamiento de agua exigida en las bases de licitación de 625 Hm3, a pesar de que a esa fecha ya conocía la medición de octubre de 2017 que le habría revelado la menor capacidad que ahora alega”, dijo.

La empresa alega que esto afectará el componente de generación eléctrica de la obra, ante lo cual el MOP señaló que es un servicio adicional que la concesionaria podía o no incluir en su oferta.

Agregó que Astaldi hacía ver que esto podía afectar la posibilidad de financiamiento, pero el MOP estima que eso está dado por la capacidad financiera de la empresa y no por el embalse.