Sustentabilidad

Avanza reforestación de especies arbóreas en peligro de extinción

Cambios en las condiciones microclimáticas de los ambientes, lo que conduce a la desaparición local de especies de fauna y hongos, destacan entre los posibles impactos de la extinción de árboles nativos.

Por: Sustentabilidad | Publicado: Miércoles 19 de julio de 2017 a las 00:49 hrs.
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Sequías, incendios, explotación directa, cambio de uso de suelo y especies exóticas invasoras. Todas éstas se han identificado como posibles causas de la extinción o bien de poner en riego a especies arbóreas nacionales, una problemática que se intenta subsanar de la mano de iniciativas público-privadas que apuntan a proteger estas especies.

Si bien a nivel nacional hay diferencias entre las entidades respecto de qué árboles están en peligro, especies nativas tales como el pitao, el roble maulino o ruil, el hualo y michay, aparecen en la mayoría de los listados bajo la clasificación de "en peligro", siendo un agravante que las dos últimas son especies raras.

Para protegerlas y reforestar, el Ministerio del Medio Ambiente contempla una herramienta inédita que establece Planes de Recuperación, Conservación y Gestión de Especies (Recoge), algo equivalente a planes de descontaminación, que aborda una situación de amenaza de especies previamente clasificadas por el Reglamento de Clasificación de Especies (RCE).

"Los planes permiten convocar a los actores interesados y que ejercen acciones en la zona de distribución de la especie, para permitir la restauración y eliminar o reducir presiones y amenazas a especies amenazadas", explica el ministro del Medio Ambiente, Marcelo Mena.

Añade que se prevé que el primer Plan Recoge será el del ruil, que comenzará su implementación en 2018. Mena agrega que se destinarán $ 500 millones para la restauración ecológica por parte del MMA entre las regiones de Valparaíso y Maule.

El rol de las empresas

En el caso del ruil, hualo y pitao, varias empresas forestales en conjunto y con apoyo estatal en la coordinación, trabajan desde hace meses en su reforestación, a través de planes de regeneración asistida.

Las forestales han desarrollado capacidades tecnológicas en sus viveros que les permiten reproducir especies nativas.

Además, han abordado distintas iniciativas relacionadas con compromisos voluntarios asumidos en el marco de sus programas de certificación de manejo sustentable.

"Hoy las empresas enfrentan la tarea de recuperar áreas de alto valor, afectadas por los siniestros en enero y febrero, junto con proporcionar plantas para otras iniciativas de restauración", comenta Fernando Raga, presidente la Corporación Chilena de la Madera (Corma).

Sin embargo, agrega, estas iniciativas, si bien son valiosas, son aún poco significativas a escala nacional, y es por ello que Corma ha sostenido que se debe perfeccionar la Ley de Bosque Nativo, para generar un marco de incentivos que potencie a gran escala la actividad privada, especialmente de pequeños y medianos forestadores, y de este modo tener un amplio campo de aplicación de estas capacidades técnica".

Arauco comprometió la reforestación de 16 mil hectáreas quemadas en incendios; de ellas, 2.400 de especies nativas en peligro de extinción en las regiones del Maule, Biobío y Los Ríos.

"La regeneración abre oportunidades para entidades públicas y privadas, para preservar quizá más especies nativas de las que había antes", comenta Iván Chamorro, gerente de Asuntos Públicos de Arauco.

Mininco -que participa en la preservación de araucarias, michay y toromiro- trabaja junto a un vivero local, donde se producen cerca de 1 millón de plantas de bosque nativo chileno que permiten aumentar las áreas de protección y apoyar la restauración de zonas dañadas.

Jean Pierre Lasserre, gerente de Tecnología y Planificación de Mininco, indica que las empresas que trabajan bajo estándares de manejo de clase deben orientar esfuerzos a proteger los ecosistemas en que se desarrollan las especies amenazadas, de tal manera de asegurar su mantención y crecimiento.

"La labores de monitoreo permanente y de difusión para los vecinos son también de gran importancia ya que con acciones simples como evitar ingresar animales que dañan la regeneración de estas especies amenazadas, se puede contribuir", afirma.

Añade que la estrategia de conservación se realiza en conjunto con una red de expertos de universidades, entre las que destaca la de Concepción y Talca, de manera que la definición de los programas de conservación sean elaborados por científicos, que incluya su supervisión periódica.

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