Filial renovable aportará 18% de Ebitda de Enel Chile tras reorganización

Con miras a la junta de accionistas del 20 de diciembre, Enel Chile comenzó hace unos días el road show para promocionar el denominado Plan Elqui, que permitirá incorporar la filial renovable de la italiana en el país a la ex Enersis. La rueda de negocios incluso los llevará a Estados Unidos a presentar el plan.

Según la presentación, sumar Enel Green Power (EGP) al holding eléctrico, la llevará a cambiar la composición de su Ebitda el próximo año, donde 18% será aportado por esta nueva línea de negocios, mientras el 21% quedará en distribución y el 61% en la ex Endesa. Se prevé que la firma tenga un Ebitda total de US$ 1.400 millones.

Pero la incorporación de EGP -que solo se producirá si minoritarios de Enel Generación Chile equivalentes a 15,02% de las acciones totales suscriben la OPA que se lanzó por la empresa- producirá otros efectos en su desempeño.

Esto, porque se estima que la capacidad instalada de generación de Enel Chile subirá 20% desde los 6,3 GW actuales, para totalizar 7,5 GW hacia 2020.

De ellos, 1,3 GW serán aportados por Enel Green Power, lo que sumado a los 3,7 GW de generación en base a tecnologías limpias que tendrá la ex Endesa, permitirá que el 63% de la capacidad se haga en base a estas fuentes.

La producción real de energía debería subir 18% en el mismo período, donde el aporte de EGP será mayor, ya que representará 3,7 TWh.

Enel Green Power tiene actualmente 18 plantas en operación, por casi 1.200 MW, donde 41% es de tecnología solar, 47% de viento, 8% de minihidroelectricidad y 4% de geotermia.

Respecto del Ebitda de generación de Enel Chile, que actualmente es de US$ 850 millones, comenzará a subir gradualmente. Para 2018 se espera un aporte de EGP de US$ 269 millones, los que luego se incrementarán hasta US$ 307 millones en 2020.

El brazo convencional aumentará su aporte hasta US$ 1.166 millones en ese año, con lo que la generación total de Ebitda de esta área de negocios será de US$ 1.474 millones.

El Plan Elqui ha sido menos ruidoso desde el punto de vista de los minoritarios que el Plan Carter II, reorganización concretada en 2015, que separó los negocios de Chile con los de la región, dando vida a una nueva compañía.