Utilidades de Enel Chile acusan fuerte caída en primer trimestre debido a una base de comparación más exigente en 2019

Una fuerte baja en sus utilidades reportó Enel Chile en el primer trimestre de este año aunque por una mayor base de comparación. La compañía dio cuenta que la utilidad neta atribuible a los accionistas de la firma alcanzó un valor de $ 70.993 millones a marzo, representando una caída de un 59,3% respecto al año anterior.

Según explicó la firma en sus documentos ante la Comisión para el Mercado Financiero (CMF), esta disminución se debió principalmente a la contabilización de un ingreso extraordinario por $ 121.118 millones en marzo del año pasado, producto del término anticipado de tres contratos de suministro eléctrico firmados en 2016 entre Enel Generación Chile y Anglo American Sur.

De hecho, aseguró que, al aislar este efecto extraordinario, el beneficio neto atribuible a los accionistas de Enel Chile se redujo un 22,7% respecto a la utilidad neta normalizada de $ 91.830 millones a marzo de 2019.

También, la firma comunicó que los ingresos operacionales totalizaron $ 649.934 millones, mostrando una disminución de 16,9% respecto a igual período del año pasado, como resultado del ingreso extraordinario antes mencionado registrado el año pasado, y de menores ventas por comercialización de gas.

Lo anterior, agregaron, "fue compensado parcialmente por mayores ventas de energía asociadas principalmente a un efecto positivo en el precio expresado en pesos, producto de la
depreciación de la moneda local respecto al dólar estadounidense". En este caso, al aislar el ingreso extraordinario generado por el término de los contratos con Anglo American Sur, los ingresos operacionales disminuyeron -según indicó la empresa- un 1,7% en relación a marzo de 2019.

Efecto Covid-19: Oportunidad para continuar con nuestro plan de descarbonización

La crisis sanitaria provocada por el Covid-19 también fue abordada por la firma en sus estados de resultados. Al respecto, reiteraron que todos los esfuerzos están puestos en garantizar el funcionamiento correcto y seguro de sus operaciones, resguardando al mismo tiempo la salud y seguridad de sus colaboradores. Y aseguraron que, en un escenario de continua evolución respecto a la extensión de los contagios y de las medidas de contención tomadas por el gobierno, "no es posible en este momento cuantificar los efectos que la pandemia podría tener en el negocio".

Sin embargo, recalcaron que debido a que el grupo posee un modelo de negocio integrado a lo largo de la cadena de valor, una estructura financiera sólida y un nivel de digitalización que permite garantizar la continuidad de las actividades operativas con el mismo nivel de servicio, "hasta la fecha de presentación de estos estados financieros consolidados, no existe evidencia de un impacto significativo por Covid-19 en el grupo".

A través de una declaración difundida por la firma, el gerente general de Enel Chile, Paolo Pallotti, reconoció que la parte final del primer trimestre de 2020 ha estado marcada por la emergencia producto de Covid-19. "En este escenario la preparación y reacción pronta de la compañía ha permitido garantizar la continuidad de servicio -todas nuestras plantas y redes eléctricas han estado 100% disponibles -resguardando en primer lugar la salud de nuestros trabajadores, clientes y contratistas", destacó.

El ejecutivo añadió que esto ha sido posible gracias a un plan de contingencia adoptado rápidamente y a todas sus inversiones en digitalización a lo largo de los últimos años. "Al mismo tiempo, la solidez de la compañía nos permite mantener los dividendos para los inversionistas en momentos en que la liquidez es clave", dijo.

Según aseguró, "seguimos con el desarrollo de nuestro plan industrial, con inversiones que en el primer trimestre alcanzaron US$ 117 millones de dólares, 65% más que en 2019, con foco en el desarrollo de nuestros proyectos renovables, la digitalización de la red y los servicios innovadores a los clientes".

En relación a los proyectos renovables, puntualizó que la situación actual puede ser una oportunidad para continuar con el plan de descarbonización, pero es importante que las autoridades competentes den prioridad a los procesos de autorización para garantizar que sus 2GW de proyectos renovables puedan seguir en marcha.