Industria

Autos usados han subido más de precio que los nuevos: los tiempos de entrega marcan la diferencia

Gremio hizo su tercera corrección al alza de ventas para el año, situándolas en 405 mil unidades.

Por: Magdalena Espinosa | Publicado: Martes 21 de septiembre de 2021 a las 04:00 hrs.
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Foto: Julio Castro
Foto: Julio Castro

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La presión y alta demanda sobre el sector automotor no baja su intensidad. No solo por el número creciente de personas que buscan comprar un vehículo, sino por todas las presiones externas que están llevando los precios al alza, como el aumento de costos de la importación, la escasez de chips de los fabricantes y al alza del dólar, que está en niveles de $ 789.

Los precios de los autos así lo están reflejando. En el segmento de los vehículos nuevos, por ejemplo, al revisar listas de precios de las automotoras, se ve que si un New MG3 1.5 MT STD costaba en enero de 2020 $ 6.990.000, actualmente llega a $ 9.490.000. O un Chevrolet Sail NB 1.5L de marzo del año pasado, que costaba $ 8.699.000, ahora está cercano a $ 10.640.000.

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En el caso de las unidades de segunda mano, el alza de precios se acentúa. De acuerdo a los datos del marketplace de remates Macal, la variación anual promedio entre los valores de agosto de 2020 y 2021 es de 62%. De hecho, la plataforma destacó que las versiones que lideran estos incrementos son las camionetas doble cabina y los SUV, con un 68% y 61%, respectivamente.

Las diferencias entre usados y nuevos

Rodrigo Carmona, dueño de Automotriz Carmona, que maneja salas de venta en La Serena y Copiapó, dice que el tiempo de espera es uno de los factores que más influye en el mayor incremento de precios que se está viendo en los usados sobre los nuevos.

“El auto usado ha subido tanto o más que los nuevos, acercándose al valor (original). Esto se debe a que hay una mayor demanda porque existe un grupo de personas que quieren tener rápido su vehículo. Sin embargo, también hay clientes que prefieren una unidad cero kilómetro. Este segmento está dispuestos a esperar 120 días para que lleguen a Chile”, dijo Carmona.

Claudia Aspe, subgerenta de marketing de Macal, coincidió con el concesionario y agregó que “la regularización del mercado está muy relacionado a que se normalice el stock disponible de autos nuevos, y esto no se ve hasta por lo menos fines del próximo año”.

En tanto, el nuevo gerente general de Citroen y DS, Alberto Garasino, explicó hace unos días en una entrevista que todos los importadores han tenido que subir sus precios a las nuevas versiones. A su juicio, el alza está entre un 20% y 25%, dependiendo de las gestiones de cada representante y cuánto traspasa a los clientes finales su alza de costo interno.

Ignacio Funes, director de Toyota Chile, comentó que sólo por efecto del dólar hay un incremento de precio global de aproximadamente 8%.

“Hoy la demanda es mucho más que la oferta y eso impulsa los precios. A eso se suma el aumento del dólar que también hace aumentar los costos. En el caso de Toyota solo hemos hecho ajustes de precio para los modelos 2022”, comentó.

Carmona agrega que las alzas de precio futuras dependerán exclusivamente de cómo se comporte el dólar, ya que las adecuaciones de producción y cómo se maneja la falta de chips en el mercado, para la construcción de nuevas versiones, es un tema que está más controlado.

Proyecciones a diciembre

El alza que ha tenido el mercado, ha llevado a que se realicen varias correcciones a las proyecciones que se tenían. En los primeros ocho meses de 2021, la comercialización de nuevas unidades creció un 91,1%, según datos de la Asociación Nacional Automotriz de Chile (Anac).

El gremio corrigió este lunes, por tercera vez, el su pronóstico a diciembre, donde se prevé un rango de entre 395 mil a 405 mil vehículos. De ser así, este sería el segundo año con mayor distribución en la historia de la industria, por detrás de 2018, pero sobre 2013. La primera estimación apuntaba a lograr un total de 360.000 unidades.

El gremio explicó que esto se debe al aumento del uso de los vehículos privados, frente a los medios de transporte públicos “como una reacción natural a los efectos de la pandemia”.

“Diversas empresas, pymes y emprendimientos han decidido adquirir modelos nuevos para potenciar sus negocios y reforzar su cadena logística con un alza en las entregas a domicilio, despachos programados y prestación de servicios al hogar”, agregó la asociación.

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