La empresa de gestión de residuos, Grupo DISAL, recibió una beca por US$ 100 mil de la fundación Bill y Melinda Gates en el concurso “Grand Challenges Explorations”, enfocado en investigaciones innovadoras para el sector salud.

La firma chilena fue premiada por un proyecto que propone utilizar los cerca de 35 mil baños portátiles que tienen en Chile, Perú y Paraguay para monitorear enfermedades y contribuir a la salud pública.

Francisco Dieguez, PhD e investigador del Departamento de Planificación Corporativa y Desarrollo Global de Negocios del Grupo DISAL, y quien está cargo del proyecto de investigación, comenta que todo se gestó bajo el nuevo enfoque y portafolio de innovación que está llevando a cabo la compañía, guiado por Innspiral, aceleradora de gestión corporativa ligada a Iván Vera.

En su primera fase el desarrollo del proyecto, considera una prueba de conceptos, la que se inició en mayo de este año y se extenderá por 18 meses. Durante este período, DISAL estudiará la factibilidad de extraer muestras desde los sanitarios, que permitan identificar los agentes patógenos que causan las enfermedades diarréicas, como por ejemplo, el cólera o escherichia coli y otras que son resistentes a los antibióticos que se usan hoy en día.

El primer país donde están realizando la recolección de muestras en fase piloto es Perú, la que luego se expandirá a Chile y Paraguay.

“Queremos ver si con este desarrollo somos capaces de identificar patógenos en distintas zonas, por ejemplo, un brote de cólera en Perú, el que podría ser detectado antes de convertirse en un problema para la comunidad”, explica Dieguez.

Añade que esta información podría ser comercializada a empresas, como las del rubro minero las que podrían interesarse por la salud de sus colaboradores. Pero también ve una oportunidad atractiva para ser parte de la información que se maneja en la salud pública.

“Constantemente se hacen mediciones de distintas enfermedades por parte del gobierno, a modo de monitoreo. Con este método podría aportar datos desde la vigilancia a la salud pública”, precisa.

Baños inteligentes

Una vez terminada esta primera etapa, proyectan una segunda fase para lo cual esperan obtener una nueva beca de la fundación Gates que puede llegar hasta US$ 1 millón.

Estos fondos les permitirían avanzan en el desarrollo de “baños inteligentes”, es decir, incorporar sistemas de sensores y tecnología para realizar mediciones de patógenos en tiempo real.

Para lograr ese objetivo, la firma ya está solicitando ayuda a diferentes universidades en Estados Unidos.

Dieguez destaca que hoy los sanitarios que están instalados ya cuentan con un GPS incorporado para geolocalizar su ubicación, por lo que ya habría terreno avanzado para, más adelante, crear un mapa de las enfermedades que afectan a diferentes zonas con el análisis de muestras.