Demora en definición de servicios mínimos entrampa negociaciones colectivas

Luego de un fallido intento de negociación anticipada, la minera Sierra Gorda solicitó el 27 de julio a la Dirección Regional del Trabajo de Antofagasta la calificación de los servicios mínimos y equipos de emergencia. Y si bien éste último tiene un plazo de 45 días corridos para emitir un pronunciamiento, los días pasaron y no hubo respuesta, motivando al Sindicato N°1 –una de las tres organizaciones de trabajadores de la empresa- a presentar el lunes 29 de octubre una reclamación formal ante la Dirección Nacional del Trabajo.

La resolución es vital, ya que sin ella ninguno de los tres sindicatos puede iniciar su proceso de negociación colectiva. Pero la medida de presión dio resultado y ayer el ente regional emitió su resolución.

Sin embargo, el camino no queda despejado, ya que ahora la empresa tiene cinco días para reclamar esta decisión y, en caso de dar ese paso, se extenderá un nuevo período en que la negociación seguirá entrampada.

"Esta demora de la Dirección Regional genera serias dificultades desde el punto de vista del desarrollo del proceso negociador, porque la normativa es expresa en señalar que no se puede iniciar mientras los servicios mínimos no estén resueltos. Estamos en una etapa súper temprana porque, aún si lográramos destrabar esta situación, tenemos que esperar el pronunciamiento de la empresa", explicó el presidente del Sindicato N°1, Maykel Ocayo.

Para el presidente de la Sonami, Diego Hernández, éste no es un caso aislado. "A través de esta reforma laboral, que comenzó su vigencia el año pasado, se han agregado nuevas obligaciones a los servicios públicos sin contar con el presupuesto y equipos técnicos requeridos para resolver este tipo de materias", explicó.

Agregó que "lo que hemos visto es que, finalmente, la Dirección Regional adopta una resolución salomónica entre lo que está pidiendo la empresa y el sindicato, sin tener elementos técnicos para fundamentar su resolución".

¿Colapso en la DT?

Pero la larga espera por un pronunciamiento del organismo ha sido una valla para diversas industrias, más allá de las mineras. Según los expertos, éste es un fenómeno generalizado que toca tanto a empresas privadas como públicas.

Por ejemplo, los sindicatos de TVN han dejado en evidencia que la DT ha exhibido una tardanza para resolver la calificación de servicios mínimos solicitada por la administración.

A esto se suma lo ocurrido en Metro, cuando la Corte de Apelaciones falló a favor del Sindicato de Trabajadores Profesionales y Técnicos de la empresa en septiembre, luego que ingresan un recurso en contra de la DT. El atraso ha dejado en evidencia el estrés que se vive por estos días en ese organismo y, además, la dilación que se da cuando se terminan judicializando estos procesos.

En una reunión entre el personal de la DT y el Sindicato N°1 de Sierra Gorda, minutos antes de presentar su reclamación por falta de calificación, los funcionarios del Servicio habrían reconocido que esta problemática era una cuestión sistémica, debido a que no existe el personal suficiente y no tienen el total de competencias para analizar estos temas.

Un abogado puntualiza que es un tema donde no hay mala voluntad, sino que tiene que ver con la complejidad del proceso y las nuevas tareas que se le endosaron a la DT.

Esto, porque además de realizar las labores propias de fiscalización de los derechos laborales que podrían estar siendo vulnerados, deben "repartir" su tiempo de inspección para los servicios mínimos cuando las partes piden verificar la naturaleza y las funciones de los cargos solicitados. Así, a los funcionarios de la DT no les quedaría más remedio que priorizar entre una tarea u otra,demorando los procesos.

No es de extrañar, comentan en la industria, que en algunas resoluciones haya errores formales, como ocurrió en el caso de Sierra Gorda, donde al momento de resolver sus servicios mínimos se le menciona como la empresa Minera Meridian Limitada El Peñón.

El director del grupo laboral de AZ, Jorge Arredondo, agrega que "el proceso implica un nivel de conocimiento técnico y celeridad que en ocasiones puede sobrepasar la realidad que tiene la DT para hacer frente en tiempo y forma a los requerimientos que se le formulan".

Consultado, el organismo público dijo que "la calificación de servicios mínimos ha requerido un gran esfuerzo técnico y humano a lo largo de todo el país, ya que es un proceso complejo que requiere de extenso análisis de todos los antecedentes y en muchos casos de visitas inspectivas e informes técnicos".

Pero asegura que "se está focalizando el trabajo de todos los equipos para emitir prontamente los servicios mínimos pendientes y establecer también una gestión estandarizada de estos requerimientos para facilitar su emisión".