Minería

Espinoza: “Codelco tiene que abrirse a nuevos negocios (...), pero no tiene mucho tiempo”

Dirigente plantea que llegó el momento de hacer un debate profundo de cómo tiene que ser la minera estatal de cara a lo que viene en el futuro.

Por: Karen Peña | Publicado: Martes 19 de marzo de 2019 a las 04:00 hrs.
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A casi un año de su salida como presidente de la Federación de Trabajadores del Cobre (FTC), el ahora consejero de la organización, Raimundo Espinoza, rompe el silencio. “Tuvimos una crisis que no está ajena a lo que ha vivido el mundo sindical en Chile. A veces hay que verlo también como una oportunidad”, reflexiona.

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Y si bien reconoce en su sucesor Juan Olguín un “dirigente 2.0”, tiene claros los desafíos de la nueva FTC: “Lo que tiene que enfrentar hoy es cómo mantiene la estabilidad de trabajo de la gente que representa en una empresa que tendrá que transformarse en distintas áreas, y donde ésta y los trabajadores tienen que entender esos cambios y que la única forma es poder construir acuerdos”.

- A un año de la crisis interna, ¿se limaron las asperezas?

- La forma como se hizo no la voy a compartir nunca, para eso hay elecciones cada cuatro años. Podría haber seguido siendo presidente, tenía los votos, pero era mejor dar un paso al costado. Olguín tiene las capacidades, tuvo un año complicado, pero en este Congreso (en abril) se entregarán nuevas direcciones. Se tocó fondo y ahora hay que salir adelante.

- ¿Por qué decide hablar ahora?

- Otras personas tienen que tomar el protagonismo en esto, pero es importante dar una visión de lo que ocurre en la empresa.

Tenemos una empresa que tiene proyectos estructurales inmensos. Hace días salió una encuesta que mostraba que el 80% de la población dice que Codelco debe permanecer en manos del Estado, pero no podemos solamente hacer un discurso. El movimiento sindical tiene que enfrentar los desafíos y el desarrollo de esta empresa.

Siempre nuestro reclamo fue que no se entregan los recursos para que la empresa se desarrollara y lo vemos en lo que está ocurriendo con el Decreto 28, en la norma de fundiciones. Hay problemas que son de responsabilidad de la empresa, otros de que el Estado no se preocupó de entregar los recursos a tiempo para desarrollar estos proyectos, y también enfrentamos una ley que tenemos que llegar a las captaciones del 95% de los gases y creo que en un tiempo más vamos a tener que llegar a 98%. No hay una política clara.

Tenemos que enfrentar los proyectos estructurales como mina subterránea, los perfiles de los trabajadores y viene todo un proceso de automatización. Codelco hoy está en una situación de poder hacer grandes transformaciones y para eso se necesita la participación de todos.

- ¿Codelco está preparada?

- Hay muchos temores. Hay que producir un cambio cultural dentro de la empresa, pero éste normalmente se habla que parte por los trabajadores. Tengo una visión distinta. El cambio cultural pasa de las 25 personas más importantes de esta empresa. Si ellos no cambian, ¿cómo le vamos a pedir a un trabajador que lo haga?

- ¿Ellos no piensan en esa lógica?

- Muchos dicen “no, aquí el problema de Codelco es un problema cultural”, y se quedan en esa frase, pero los que tienen que cambiar son los que administran. Codelco tiene que abrirse a nuevos negocios.

Por ejemplo, cómo utilizamos nuestros puertos, particularmente el de Salvador, para embarcar concentrado del sector privado. Qué alianzas podemos lograr respecto del movimiento de concentrado en forma terrestre por ferrocarril. Las carreteras están saturadas, ahí tiene que haber una política del gobierno, de Codelco y una gran participación del mundo sindical.

Es decir, cómo llevamos el concentrado desde Chuqui a la fundición de Potrerillos por ferrocarril, y cómo lo movemos desde ahí al puerto Barquito, cómo recuperamos la línea férrea que se destruyó en el aluvión. Eso Codelco no lo puede hacer solo. Para eso tiene que tener socios. Necesitamos gente que esté mirando ese tipo de situaciones que están ocurriendo y otras empresas las tienen.

- ¿Esa discusión de los nuevos negocios y desafíos de largo plazo ha estado presente en Codelco, pero no de la forma necesaria?

- El gobierno tiene que tener una visión política de cómo aprovechamos esta empresa para desarrollar otros tipos de negocios. Esto, tanto en los temas de litio, portuarios, terrestres y también cuidando el corazón de esta empresa, que es el cobre. Eso no significa que vamos a dar un cheque en blanco. Tenemos que defender los intereses de los trabajadores, pero debemos defenderlos bien.

- Esta discusión de abrirse a nuevas áreas ha sido recurrente y siempre asoma la privatización...

- Creo que Codelco no tiene mucho tiempo (para abrirse a nuevas áreas). El problema es que se ha ido postergando, pero también los otros han ido avanzando más rápido que nosotros.

- ¿Hay seguridad de que el fantasma de la privatización no anda rondando?

- Siempre va a estar presente, pero tenemos que hacer las cosas bien y que el Estado le entregue los recursos necesarios a esta empresa para desarrollarla. Si no hacemos las cosas bien, indiscutiblemente que nos van a privatizar.

- Se podría pensar que si se habla en serio los temas de abrirse a nuevos negocios y explorar todos los desafíos pendientes, se podría abrir el debate también de una privatización...

- Nunca he tenido problema en ese sentido. Si queremos discutir de una vez por todas qué es lo que queremos hacer con Codelco, discutámoslo y de cara al país.

- ¿Cómo se ve el tema de la capitalización de la empresa?

- Hay que entrar a discutir una nueva ley. Tiene que haber una capitalización permanente. Esta es una empresa productora de cobre, no un servicio público. Hay que abrir una discusión y la Federación debe sacar un acuerdo sobre eso.

El país no puede soportar el tema de la Ley Reservada con respecto a lo que está ocurriendo y hay que clarificarlo.

Pizarro, “una gran labor”

- ¿Qué rol juega la administración en todo este debate?

- Siempre va a estar la espada de Damocles en la cabeza de Codelco. La gente no quiere privatizar Codelco, pero quiere que las cosas se hagan bien, con mucha transparencia y que tenemos que enfrentar los desafíos que hoy día el mundo afuera nos está exigiendo.

- ¿Con Juan Benavides y Nelson Pizarro a la cabeza se dan pasos concretos en transparencia?

- Ha habido pasos muy concretos en el tema de poder transparentar esta empresa, no de ahora, de cuando estaba Óscar Landerretche. Se viene haciendo todo un tema de probidad, pero a veces nos podemos pegar en los pies. Esta empresa necesita mucha transparencia, pero también necesita manejarse como una empresa y eso a veces mucha gente no lo entiende.

- ¿Y el conflicto que tiene con Contraloría no le pasa la cuenta?

- Contraloría tiene que hacer su pega y Codelco la suya. Esta empresa no se puede manejar como un servicio público. Para eso tiene una ley especial, se rige por una serie de situaciones, pero no la puedes manejar como un servicio público o será absolutamente ineficiente.

- ¿Cómo ve la gestión de Pizarro, se dice que este año podría dejar la empresa?

- Para todas las personas llega el minuto en que se tienen que ir. Pizarro ha cumplido una gran labor. Nunca uno es monedita de oro para caerle bien a todo el mundo (...) Ha tenido la particularidad de enfrentar estos proyectos que son inmensos. A Pizarro le ha tocado duro, pero son más las cosas positivas que las negativas.

- ¿Cuál es su llamado a Codelco respecto de los desafíos que vienen?

- Veo un Codelco que tiene las capacidades y el recurso de un Codelco distinto, con muchas más expectativas de crecimiento, de aumentar la producción, hacer nuevos negocios con socios que sean interesantes, que le den viabilidad. Veo un Codelco para muchos años, pero de forma distinta.

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