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Villaseñor, la viña más austral se ubica en Puelo

La cepa que mejor han desarrollado es el Pinot Noir y hoy su producción en la región de Los Lagos alcanza las 1.500 botellas por año.

Por: Nidia Millahueique M. | Publicado: Viernes 31 de marzo de 2017 a las 04:00 hrs.
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Fue hace ocho años cuando la familia Villaseñor descubrió lo que hoy es la viña más austral del mundo. En medio del parque Tagua Tagua, en los alrededores de Puelo, un pueblo de Los Lagos que se volvió famoso por la consigna “Puelo sin torres”, que buscaba frenar el paso de una línea de transmisión eléctrica por la zona, la familia oriunda de la Sexta Región, pero con otras inversiones turísticas en esta zona, encontró una parra adosada a un ciprés que había crecido de forma vertical y se extendía por cerca de 15 metros.

“Lo que nos llamó la atención era que donde no había gente hubiese una parra y en base a eso, alguien dijo si esta parra sobrevivió, por qué no plantamos. Ahí fue cuando partimos con este proyecto en la Patagonia”, dice Sergio Subiabre, Export Director de la empresa.

Hoy Villaseñor Wines tiene cerca de 30 hectáreas cercanas al lugar donde encontraron esa parra y producen 1.500 botellas por año en Puelo. Dicen que les ha ido bien, ya que “generalmente en los mercados asiáticos nos piden un año antes. Eso nos tiene bien contentos, porque ya tenemos los clientes para lo que queremos, que es emprender en esa zona”.

Subiadre añade que el lugar tiene un microclima. “En este valle las montañas evitan que caiga la nieve directamente sobre el viñedo. Y el río impide que las heladas sean muy duras. El suelo es rocoso, lo que nos da un mejor drenaje. Todas esas características se vieron y partimos con cerca de 3 hectáreas para probar”, relata.

En principio plantaron un jardín de variedades, con cerca de seis cepas y las que mejor se mantuvieron fueron Marsanne, Roussanne y Pinot Noir, “pero de esas tres, la que mejor características tuvo fue la última. Es más, esa fue la primera cosecha la tuvimos el 2014”, comenta Subiabre.

Ahora están adquiriendo un nuevo campo en la zona, donde van a plantar alrededor 10 hectáreas más, “para llegar en tres años a unas 40 hectáreas”, añade.

Hoy además tienen la denominación de origen Osorno, dado que las parras se desarrollaron en ese valle, aunque ahora están más al sur. “Pero estamos trabajando para poder obtener la de Puelo, que sería la más extrema del sur del mundo”, recalca.

La zona tiene una temperatura promedio de 10 a 12 grados en el año y en verano puede llegar fácilmente a los 30 grados y caen alrededor de 2.500 milímetros de lluvia por año. El lugar también sale del esquema tradicional, ya que posee cepas como Sangiovese, Tempranillo, Petit Verdot, entre otras, y en los próximos dos años pretenden “comercializar otras poco exploradas en Chile como Sauvignon Gris, Tannat y Roussane”, revela Subiabre, quien añade que la vendimia la realizan la primera o segunda semana de abril.

90% de la producción es para exportación

La empresa también posee viñedos en zonas más tradicionales, como Codegua en O’Higgins e Itahue en el Maule. “Son alrededor de 400 hectáreas plantadas y cada lugar por sus características define cepas diferentes”. En total son cerca de 20 variedades plantadas y de ellas están comercializando 12.

“El 2013 fue nuestro primer año de exportación, con 4 mil cajas y este año pretendemos sacar cerca de 120 mil”, asegura Subiabre. A pesar de que llevan casi cuatro años en el mercado, se han posicionado.

“Hemos sacado vinos de buena calidad y el precio de una caja está entre US$ 36 y US$ 360 por caja de doce botellas, que es el de Puelo. Los premium se venden en cerca de US$ 80 y los reserva en US$ 40”, detalla el ejecutivo.

El 90% de lo producido es para exportación. ¿Cuáles son sus mercados? “China y Japón. También estamos en Estados Unidos, algunos países de Latinoamérica y Europa”, dice el ejecutivo.

Hoy la viña tiene su principal bodega de producción y embotellado en Itahue, la que está en proyecto de expansión para alcanzar un millón de litros. El ejecutivo comenta que “a eso también se suma que en el mismo lugar construiremos un hotel boutique, al lado de la viña, para desarrollar de mejor manera el enoturismo”. La inversión que tiene estimada para los próximos dos años es de $ 1.500 millones, que se suman a los $ 2.500 millones que considera todo el proyecto.

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