Candidato moderado se rezaga en Francia y nacionalista gana terreno para balotaje

El candidato de centro, Emmanuel Macron, que se ubicó en segundo lugar de las encuestas para las elecciones presidenciales en Francia después del escándalo sobre el trabajo fraudulento de la esposa del republicano François Fillon, empieza a perder terreno.

Según el sondeo de Elabe publicado ayer, el independiente obtendría 17% de los votos en la primera vuelta, por debajo de la ultra derechista Marine Le Pen con 27% y Fillon con 20%. El socialista Benoît Hamon quedaría cuarto, con 12%.

Le Pen, que también enfrenta una investigación por presuntas irregularidades, reduce la brecha frente a sus rivales en una segunda vuelta. Contra Macron sube de 37% a 41%, mientras que el candidato moderado se impondrían con 59%. Frente a Fillon mantendría el 44% anterior, versus 56%.

El republicano –conocido por su drástica propuesta de recortes de gastos– está tratando ahora de recuperar el tiempo perdido por el escándalo, y aprovechar la incertidumbre con el programa económico de su rival de centro, cuyo lanzamiento fue postergado para este viernes. Ayer prometió mantener el seguro médico estatal, dando pie atrás en sus planes de ahorrar US$ 21.000 millones en cinco años en servicios de salud.

Apoyo inesperado

Mientras tanto, Macron recibió ayer un apoyo inesperado: el ministro de agricultura y portavoz del gobierno, el socialista Stephane Le Foll, dijo que puede apoyar al conservador. “Llega el momento para la responsabilidad política respecto de qué está en juego, respecto a Marine Le Pen y el programa de François Fillon”, señaló. El ministro del Exterior, Jean-Marc Ayrault, también ha dicho que apoyaría al independiente en vez del candidato socialista Hamon.

Mientras tanto, la popularidad de Macron puede sufrir otro golpe si el centrista François Bayrou –quién marcó 18,6% en las elecciones de 2007 y 9,1% en 2012– decide sumarse a la campaña electoral. Se espera que haga su anuncio hoy. Macron, mientras tanto, está de viaje de campaña en Londres, donde se reunió ayer con la primera ministra, Theresa May.