Colombia va a las urnas el domingo y esto es lo que se juega su economía

Dos fantasmas penan la papeleta de la primera vuelta presidencial en Colombia: el del expresidente del país Álvaro Uribe y el del difunto exmandatario venezolano Hugo Chávez. El primero, hoy un influyente senador de derecha, impulsa la candidatura de Iván Duque, su excolaborador y líder en las encuestas. El segundo es una figura central para la carta de izquierda, Gustavo Petro, quien ha buscado distanciarse de la crisis que vive el país vecino, pero defiende al exgobernante y va segundo. Por su parte, el exgobernador de Antioquía Sergio Fajardo busca representar el centro político y apelar al voto de los jóvenes.

Unos 36 millones de colombianos están habilitados para votar el domingo, en un país en que vive una recuperación económica incipiente y se aferra al alza de los precios del petróleo. En juego están los impuestos a las empresas y el IVA, que el gobierno de Juan Manuel Santos subió el año pasado, pero también el respeto a los acuerdos de paz con la guerrilla de las FARC.

El uribismo quiere bajar impuestos a las empresas

El abogado de 41 años llega a la primera vuelta respaldado por el expresidente Álvaro Uribe y con crecenciales de exfuncionario del Banco Interamericano de Desarrollo y de Naciones Unidas.
Su agenda incluye una reducción gradual de los impuestos a las empresas del actual 34% a 27%, que promete acompañar con una baja también paulatina en "gastos innecesarios" del erario público. Para reactivar el sector agrícola, ante la posibilidad de explotar las tierras antes ocupadas por las FARC, propone diez años de exención del impuesto a la renta para las inversiones productivas en el campo. Y aunque no quiere recortar el Impuesto de Valor Agregado, planea organizar un "día sin IVA" seis veces al año, para reactivar el comercio formal.
Duque también promete diversificar los socios comerciales del país y la base exportadora, simplificando los trámites. Pero asegura que no negociará nuevos tratados de libre comercio.
Con todo, el candidato uribista apunta a lograr un crecimiento de 5% del Producto Interno Bruto anual. El actual gobierno prevé una expansión de 3% este año, tras un 2,2% registrado en el primer trimestre.

Menos IVA y exenciones, más industrialización

El exalcalde de Bogotá, a quien sus contrincantes enrostran su cercanía con Hugo Chávez, ha buscado distanciarse del actual presidente venezolano, Nicolás Maduro, a quien calificó como un "dictador" en una entrevista con Newsweek la semana pasada.
A la economía colombiana, Petro le ofrece aumentar el gasto público en educación, ciencia, cultura, deporte y protección de la primera infancia, al tiempo que reduce el IVA del actual 19% a 16%.
En contraparte, buscará aumentar el impuesto a las empresas y eliminar exenciones que, dice, no son necesarias y no aportan a la economía. Promete que no expropiará tierras, sino que las comprará con títulos de deuda pública.
Otro de los ejes de su agenda económica es el establecimiento de un impuesto al carbono, que se cobrará a las importaciones de productos que contaminan. Su valor dependerá del grado de emisión de CO2 de las mercancías.
En el área comercial, el candidato de izquierda propone priorizar el mercado interno e impulsar la industrialización del país, para "pasar de una vocación extractiva a una productiva".

El centro apuesta por una nueva reforma tributaria

El exgobernador de Antioquía propone como eje central una lucha contra la corrupción que, asegura, deberá devolverle a la economía colombiana al menos un punto del PIB, que destinará a educación y ciencia.
El candidato no ha querido prometer una reducción del IVA, que el presidente Juan Manuel Santos aumentó el año pasado, asegurando que una promesa así "es irresponsable en este momento". En cambio, ha asegurado que delineará una reforma tributaria que se debatirá públicamente, con todos los actores de la sociedad.
Sí promete rebajar los impuestos a las empresas de manera progresiva, junto con generar una tasa especial para las PYME, apuntando a la creación de 1,5 millón de puestos de trabajo. También propone un llamado Plan de Reactivación basado en la infraestructura, con énfasis en el transporte y las telecomunicaciones.
En materia comercial ha asegurado que es necesario realizar "una evaluación rigurosa" de los pactos de libre comercio del país, para "mirar que no exista una competencia desleal".