Donald Trump sube la presión sobre los republicanos para que aumenten el techo de la deuda

Septiembre será un mes clave no sólo para la solvencia política del presidente estadounidense Donald Trump, sino también para la solvencia financiera de todo el país. Los republicanos tendrán menos de un mes para aprobar el aumento del techo de la deuda, límite al que el país llegará a principios de octubre, y el presupuesto para el año fiscal 2018 que empieza ese mismo mes.

A pesar de que el partido controla la Casa Blanca y tiene mayoría en ambas cámaras del Congreso, el desorden dentro de la administración amenaza con dificultar la aprobación, lo que dejaría a Trump en crisis y al país en el default.

Ayer, el mandatario criticó duramente a los republicanos por el “enredo” en las negociaciones sobre el límite de la deuda, señalando a través de Twitter que pidió al líder republicano del Senado, Mitch McConnell, y al presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan, vincularlo “al popular proyecto de veteranos (que acaba de aprobarse)”.

“No lo hicieron, así que ahora tenemos un gran enredo con los demócratas deteniéndolos (como siempre). Podría haber sido tan fácil, ¡ahora es un desastre!”, sentenció.

Ryan salió a calmar los ánimos, afirmando que el país “paga sus deudas y continuará haciéndolo”. “Aprobaremos la legislación”, aseguró, y agregó que hay “muchas opciones diferentes” de hacerlo. La opción de vincular las dos propuestas fue discutida en julio, pero entonces el ala conservadora del partido exigió que cualquier proyecto relacionado con el techo de la deuda fuera asociado con los recortes de gastos.

Carrera contra el tiempo

Los republicanos están en una carrera contra el tiempo para lograr elevar el límite de deuda. El Tesoro se quedará sin fondos para pagar las obligaciones el 2 de octubre (la llamada fecha x), afirmó ayer el Centro de Política Bipartidista (BPC, su sigla en inglés). Ese día debe entregar US$ 80.000 millones al fondo militar de jubilación.

El Tesoro ya alcanzó el techo disponible, de US$ 19,8 billones (millones de millones), en marzo, y desde entonces está aplicando “medidas extraordinarias”, priorizando el pago de deudas ante el cumplimiento de otras obligaciones.

En julio el Tesoro advirtió que la nueva meta tiene que ser aprobada antes de 29 de septiembre. Tomando en cuenta que los congresistas están ahora en receso y volverán a Washington recién el 5 de septiembre, tendrán doce días legislativos para llegar a un acuerdo.

Batalla presupuestaria

Ese es el mismo plazo que tendrán para lograr un consenso sobre el presupuesto para el año fiscal 2018 que empieza el 1 de octubre, ampliando el campo de batalla para los republicanos. Las complicaciones que ha habido hasta ahora apuntan a que no será fácil: en abril, los congresistas tenían que aprobar un proyecto provisional para tener otra semana de negociaciones para acordar el financiamiento gubernamental hasta octubre.

Las últimas declaraciones de Trump hacen la tarea más difícil aún. Después de que el mandatario no logró incluir el monto solicitado para los gastos de defensa en mayo, afirmó que “un buen cierre del gobierno” puede servir para devolver orden al Congreso. El martes reiteró sus amenazas de un cierre del gobierno si no se aprueba el financiamiento para el muro fronterizo con México.

Así, como ya señaló McConnell, los republicanos probablemente necesiten otro proyecto de recurso provisional para tener más tiempo para negociar el presupuesto.

En este escenario, los mercados están cada vez más nerviosos a medida que se acerca septiembre. El miércoles la agencia calificadora Fitch advirtió que en caso de que no se logre aprobar el aumento del techo, la calificación AAA del país está en riesgo por el daño potencial a la confianza de los inversionistas, que es lo “que le permite a su rating AAA tolerar un nivel tan alto de deuda pública”.

Ayer, Moody’s Investors Service afirmó que aunque “la probabilidad de que el pago de deuda no se logre es baja”, los “riesgos para los tenedores de bonos del Tesoro creados periódicamente sin una solución al techo de la deuda contribuye a directos, aunque pequeños, costos financieros”. En 2011, S&P rebajó el rating del país desde AAA a AA+, después de la batalla por el techo de deuda que costó al gobierno US$ 1.300 millones, por aumento de los costos de prestación.

La líder de los demócratas en la cámara baja, Nancy Pelosi, llamó a los republicanos a “terminar con el caos y ordenarse en el apuro”. “Con la Casa Blanca, la Cámara de los Representantes y el Senado bajo el control de un partido, el pueblo espera y merece un plan de los republicanos para evitar el default catastrófico y asegurar la plena fe y crédito en EEUU”, afirmó.

Reforma fiscal

A su vez, el gobierno está intentando entregar un mensaje optimista en otro asunto clave de la agenda de Trump para impulsar el crecimiento económico, la reforma fiscal.

Ayer, la portavoz de la Casa Blanca, Sarah Huckabee, afirmó que se pueden esperar noticias la próxima semana sobre el proyecto que sería presentado en el otoño (boreal).

Sin embargo, según señalaron a Bloomberg dos fuentes cercanas al asunto, el desacuerdo llegó a tal punto que los congresistas no van a esperar el plan conjunto con la Casa Blanca, sino que resolverán las dudas pendientes sobre los principales puntos de la reforma a través de las comisiones de Presupuesto de ambas cámaras.

Correo vincula a campaña de Trump con Moscú

€El comité del Senado que investiga la intromisión rusa en las elecciones presidenciales habría encontrado otra prueba de contactos entre el Kremlin y asesores de Donald Trump durante su campaña, informó ayer CNN citando fuentes. Se trata de un correo electrónico enviado por Rick Dearborn, ahora jefe de personal adjunto del presidente, a funcionarios de campaña que contendría información sobre una persona que intentaba conectarlos con el mandatario ruso, Vladimir Putin. La revelación se suma a otras como la reunión entre Donald Trump Jr. con una abogada rusa que iba a entregarle información comprometedora sobre Hillary Clinton.