Las mediciones de desempleo en EEUU se ponen en duda en la era de Donald Trump

Desde la Gran Depresión, las cifras de desempleo que entrega el Departamento del Trabajo de Estados Unidos han sido un indicador clave para las decisiones de política económica y su cálculo ha influido las mediciones mundiales de desocupación. Pero el nuevo gobierno no las ve con confianza.

En su testimonio ante el senado, el nominado de Donald Trump para encabezar el Departamento del Tesoro, Steven Mnuchin, señaló que la cifra de desempleo tiene “una influencia excesiva” sobre las políticas del país y criticó que no considera a las personas que salen del mercado laboral o no están buscando un trabajo activamente. Asimismo, el vocero de la Casa Blanca, Sean Spicer, ha asegurado que la nueva administración revisará “múltiples estadísticas” para determinar la fuerza del mercado laboral.

Ambos se hacían eco de la campaña del mandatario, quien puso en duda el 4,7% de desocupación con el que cerró el gobierno de Barack Obama, calificando la medición de “falsa”.

El debate sigue abierto en momentos en que la Reserva Federal (Fed) prepara tres alzas de tasa de interés para este año. El miércoles, la institución señaló que “el mercado laboral ha seguido fortaleciéndose”, una señal de desacuerdo con la visión negativa que la Casa Blanca tiene sobre el empleo en el país.

Medidas alternativas

La ex comisionada de Estadísticas del Departamento del Trabajo, Erica Groshen, dijo a Bloomberg que la versión actual de la tasa de desempleo, conocida como U-3, “es el número más comparable a través del tiempo y también internacionalmente. Hemos medido el desempleo de la misma forma desde 1940. La mayoría de los otros países usan una definición similar, en parte porque nosotros la creamos y porque funciona”.

Pero no es la única opción. En sus respuestas ante el senado, Mnuchin citó una medición conocida como U-5, que, además de las personas sin trabajo que buscan activamente uno, incluye a los trabajadores insatisfechos que cambiarían de empleo y a la llamada “fuerza laboral marginal”, que quieren un trabajo, pero no buscan activamente uno.

Una tercera forma de medir el desempleo es el llamado U-6, que también considera a los empleados de tiempo parcial que quieren un trabajo de tiempo completo.

Fuerza de la economía

Las solicitudes de beneficio de desempleo se mantuvieron bajas la semana pasada, según reportó ayer el Departamento del Trabajo. El indicador, que se situó en 246.000 peticiones, se ha mantenido por bajo la barrera de los 300.000 por cien semanas seguidas. Esta semana, el instituto ADP también mostró que las contrataciones de enero fueron robustas. Esa fortaleza sería puesta en duda si la Casa Blanca busca redefinir las mediciones de empleo.

Modificar la forma de medir el desempleo, dijo a Bloomberg el economista jefe de Wells Fargo en Carolina del Norte, “sólo me diría que estás confundido. Que no sabes a qué apuntar”.

Presidente genera roces con Australia e Irán a través de mensajes en Twitter

"Irán estaba en sus últimos respiros y listo para colapsar hasta que llegó EEUU y le dio una línea de vida en la forma del Acuerdo Irán: US$ 150.000 millones", señaló ayer, en Twitter, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump. Su mensaje llegó luego de una escalada de roces con Teherán, luego de que se diera a conocer que la islámica república realizó una prueba de misiles balísticos.

No es la única relación bilateral que se ha tensado por los mensajes que el jefe de Estado publica en la red social. Ayer, el primer ministro de Australia, Malcolm Turnbull, tuvo que salir a explicar la filtración de una conversación telefónica que tuvo con Trump, luego de que éste criticara un acuerdo de intercambio de refugiados alcanzado con la administración de Obama, que calificó como "estúpido"."Yo defiendo a Australia. Mi trabajo es defender los intereses australianos", dijo Turnbull, quien rehusó confirmar si Trump le había dicho que su conversación telefónica había sido "la peor hasta el momento".

Vínculos con Alemania

Berlín, aliado estratégico de Estados Unidos en Europa, no ha escondido sus críticas a la nueva administración estadounidense, que la ha acusado de manipular el euro a su favor.

Ayer, el coordinador transatlántico del gobierno alemán, Jürgen Hardt, dijo al diario Der Tagesspiegel que el círculo cercano del presidente estadounidense tiene poco conocimiento sobre la Unión Europea e intenta negociar acuerdos comerciales bilaterales.

"Tenemos que dejar claro que los asuntos comerciales no son asuntos nacionales, sino que su competencia recae en la UE" y agregó que "mi impresión es que el conocimiento de cómo funciona la UE no es muy notable, al menos no en el círculo cercano a Trump".

muro tomaría dos años

El secretario de Seguridad Nacional de Estados Unidos, John Kelly, espera que el muro fronterizo con México se termine dentro de dos años, según una entrevista transmitida ayer por la cadena de televisión Fox News. "El muro se construirá primero donde se necesita y se irá completando", dijo Kelly en la entrevista. "Realmente espero que esté listo dentro de los próximos dos años", añadió, aclarando que pensaba que el financiamiento del Congreso para el enorme proyecto se obtendrá "relativamente rápido".