Uber está de vuelta en China... pero para fabricar bicicletas

Dos años después de salir de China, Uber Technologies ha vuelto a poner los pies en el país asiático. Sin embargo, el personal de allí no está trabajando en el negocio principal de la compañía de transporte, sino en la supervisión de la creación de bicicletas y patinetes, la apuesta de Uber al próximo éxito entre los consumidores.

Después de comprar Jump Bikes, un servicio de alquiler de bicicletas en Estados Unidos, Uber está preparado para presentar su propio patinete, sumergiéndose en un nuevo y caótico mercado de tránsito. Uber está añadiendo cadena de suministro, contratación y otro tipo de personal en el sur de China para trabajar en estrecha colaboración con los fabricantes de estos vehículos, según Rachel Holt, jefa de la unidad de Nueva Movilidad de Uber.

Holt también dijo que la compañía con sede en San Francisco podría introducir estos servicios en otros países asiáticos, como Japón, donde Uber tiene operaciones limitadas por razones regulatorias. "Sin duda tenemos aspiraciones globales aquí", dijo en un evento el viernes en Hong Kong.

Sin embargo, esos planes no incluirán China continental en el corto plazo. Uber vendió sus operaciones allí a Didi Chuxing en 2016 después de sufrir grandes pérdidas. Y China ya cuenta con un montón de compañías de bicicletas eléctricas enzarzadas en una encarnizada competición. Holt admitió que Uber no tiene planes inmediatos para servicios similares en China.

Uber continuará invirtiendo en la cadena de suministro del país, dijo Holt, a pesar de los crecientes costes políticos. Tanto las bicicletas eléctricas como los patinetes están incluidos en la lista de aranceles de la Administración Trump, que suma un impuesto del 25% a cada componente que importa Uber. Holt no quiso nombrar socios de fabricación, pero sugirió que el volumen de Uber sería significativo. "Tenemos el potencial de ser un cliente muy, muy grande para ellos", dijo.

La ejecutiva también insinuó que los nuevos patinetes de Uber dependerán de un ensamblador diferente al de sus rivales, como Bird y Lime, cuyos vehículos han surgido de la noche a la mañana en ciudades de Estados Unidos. "Todos están usando el mismo patinete", dijo Holt. "Pero no se han diseñado para la forma en que se usan, y por eso estos patinetes sólo duran unos meses".