Adam Neumann renuncia a su cargo como CEO de WeWork

Adam Neumann fue expulsado como director ejecutivo de WeWork, después de que algunos de los mayores patrocinadores de la compañía que generaba pérdidas perdieran la fe en el cofundador de 40 años, producto del dramático colapso de la Oferta Pública Inicial.

Neumann también aceptó ceder el control de la firma, pues ya no tendrá la mayoría de los derechos de voto en el grupo, según cercanos el asunto. El jefe de finanzas, Artie Minson, y el vicepresidente de WeWork, Sebastian Gunningham, asumirán como co-directores ejecutivos y Neumann se convierte en presidente no ejecutivo.

La caída en desgracia de Neumann es un revés importante para las empresas jóvenes, publicitadas y respaldadas por firmas donde el culto al fundador alguna vez fue especialmente fuerte. En los últimos años, sólo se compara con la salida de Travis Kalanick como director ejecutivo de Uber.

La reorganización fue aprobada por el directorio de WeWork ayer.

“Aunque nuestro negocio nunca ha sido más fuerte, en las últimas semanas, el escrutinio hacia mí se ha convertido en una distracción significativa, y he decidido que es en el mejor interés de la empresa renunciar como director ejecutivo”, dijo Neumann.

En un email escrito con el personal, los nuevos CEOs dijeron que se centrarían en “mejorar nuestra gestión y operaciones”, y agregaron: “Aunque anticipamos decisiones difíciles por delante, cada una de ellas se tomará con un análisis riguroso, siempre teniendo en cuenta la intereses y bienestar a largo plazo de la compañía”.