Exfuncionario del FMI asume como premier para destrabar crisis en Italia

Roma/Londres

Los inversionistas abandonaron ayer los bonos y acciones italianos luego de que Sergio Mattarella, el presidente de Italia, buscara superar las tensiones políticas y en los mercados al pedirle a Carlo Cottarelli, un exfuncionario del Fondo Monetario Internacional, que asuma un gobierno tecnocrático.

La crisis en la tercera mayor economía de la zona euro escaló después de que Mattarella frustrara el domingo el intento de dos partidos populistas de formar una coalición.

Cottarelli intentó entregar un mensaje de calma a los mercados, aun cuando se cree que es altamente improbable que gane un voto de confianza, lo que gatillaría que se realicen nuevas elecciones en el otoño (boreal).

“La economía italiana sigue creciendo y las finanzas públicas están bajo control”, afirmó antes de aludir a la política europea, la causa de la confrontación entre Mattarella y los partidos populistas. “El diálogo con la UE para defender nuestros intereses es esencial y podemos hacerlo mejor (pero) tiene que ser constructivo”.

Pero el mensaje no logró convencer a los inversionistas en medio de la confrontación entre los populistas y el antiguo orden político. El rendimiento de la deuda italiana a dos años vio su mayor movimiento intradía desde el peak de la crisis de la zona euro a mediados de 2012, un alza de 50 puntos base en el día, para llegar a 0,981%.

El índice bursátil FTSE MIB también recibió un duro golpe, liderado por las acciones bancarias. El principal barómetro de las acciones de Italia cerró con una caída de 3,59%, borrando todas sus ganancias del año.

El nombramiento de Cottarelli se produjo tras el colapso de los planes de coalición del anti-establishment Movimiento Cinco Estrellas y la Liga, de extrema derecha, los grandes ganadores de la última elección general de Italia a principios de marzo.

La alianza entre Cinco Estrellas y la Liga se cayó en la última valla, después de que Mattarella bloqueara su propuesta de nominar a Paolo Savona, economista euroescéptico, como ministro de Finanzas, llegando a un dramático punto muerto el domingo en la noche.

Alivio en Europa

Su decisión fue celebrada por el presidente francés Emmanuel Macron, quien proclamó su apoyo a lo que él describió como la “valentía” y “gran sentido de la responsabilidad” de Mattarella al realizar su “tarea esencial, que es proteger la estabilidad institucional y democrática de su país”.

Pero el alivio de corto plazo de otros gobiernos europeos porque se evitó un gobierno populista en Roma fue templado por las preocupaciones de que la decisión de Mattarella pudiera incentivar a partidos anti-establishment en Italia y en otros países. Luigi Di Maio, el líder de Cinco Estrellas, convocó a una protesta el 2 de junio, un feriado nacional. “La noche del domingo fue la más oscura en la historia de la democracia italiana”, afirmó.

A pesar de que Mattarella tiene el poder constitucional para aprobar o rechazar opciones ministeriales, su acción fue fieramente atacada por los dos partidos populistas como una traición a la voluntad del pueblo italiano.

Difícil apoyo

Cottarelli dijo que esperaba asegurar el apoyo en el parlamento para un período que duraría hasta fin de año, de modo de poder redactar el presupuesto italiano del próximo año. Tanto Cinco Estrellas como la Liga prometieron oponerse a cualquier solución tecnocrática, así es que es poco probable que Cottarelli gane un voto de confianza.

En ese caso, dijo Cottarelli, su gabinete se mantendrá en el cargo como una administración interina políticamente neutral, hasta una nueva elección, que podría ocurrir “después de agosto”. Esto significa que incluso cuando se dirige a la cumbre del G7 y a un consejo Europeo clave en junio, Cottarelli podría no estar totalmente empoderado.

Ayer los líderes populistas aumentaron sus ataques a Mattarella por no poder lograr que su propio gobierno se materializara. “He leído y releído la constitución y no hay ningún artículo que prohiba cambiar las reglas de la UE”, dijo Matteo Salvini, el líder de la Liga, en una entrevista radial, agregando que “nunca nadie pensó en dejar el euro”.

Mattarella tomó la decisión de bloquear a Savona porque creía que el nombramiento pondría en peligro los lazos de Italia con la UE, desencadenando aún mayores ventas masivas de activos italianos en los mercados internacionales. Savona respondió a Mattarella en una entrada en un blog ayer, diciendo que había sufrido “un daño serio desde la principal institución en el país sobre la base de un juicio paradójico sobre mis intenciones de dejar el euro, y no por aquellas en las que creo”.

Algunos analistas políticos plantean que Cinco Estrellas y la Liga podrían intentar cementar su alianza al unirse de cara a la próxima elección, en lugar de revertir su estatus preeleccionario de rivales.

Voto de confianza a Rajoy

El primer ministro español, Mariano Rajoy, enfrentará un voto de confianza a su liderazgo el viernes, una instancia que amenaza con terminar con seis años de gobierno de centroderecha en Madrid y que intensifica la crisis política en el sur de Europa. El voto, cuya fecha fue anunciada ayer, estaba originalmente convocada por el opositor Partido Socialista después de que una corte española entregara un fallo condenatorio la semana pasada en un caso de corrupción que involucra a miembros del gobernante Partido Popular.
La votación será precedida por un debate el jueves sobre si Rajoy debería ser reemplazado por Pedro Sánchez, el líder socialista.
Albert Rivera, líder de Ciudadanos, que en teoría tiene los votos para aprobar la moción, dijo que la autoridad del gobierno de minoría de Rajoy está "liquidada".