Presidente de Perú evalúa un cierre constitucional del Congreso para combatir la corrupción

El presidente de Perú, Martín Vizcarra, dejó abierta una vez más la posibilidad de aplicar el mecanismo constitucional que le permite cerrar el Parlamento. En ese sentido, indicó que su gobierno respeta la Carta Magna y usa todos los mecanismos que hay en ella para cumplir sus compromisos.

"(En la Constitución ) está establecida la cuestión de confianza que si no se da permite el cierre del Congreso. Hemos dicho que no descartamos ni una medida para lograr el objetivo de luchar y de destruir la corrupción que tanto daño le ha hecho a Perú, pero que ahora estamos decididos a combatirla", expresó en una entrevista en el canal de noticias CNN.

Al señalarle que si cierra el Parlamento sería tachado de golpista, Vizcarra indicó que no lo haría incumpliendo ningún procedimiento. "Lo que queremos es fortalecer las instituciones y luchar contra la corrupción. Para ello están los mecanismos en la Constitución y estamos siendo rigurosos en su cumplimiento", apuntó.

Señaló que el Ejecutivo presentó desde hace más de un mes al Legislativo sus propuestas para llevar adelante la reforma del sistema de justicia y político a través de un referéndum.

El mandatario coincidió con los especialistas al decir que su gobierno es "huérfano", pues no cuenta con un partido político, además tiene una bancada mínima y no tiene bases; sin embargo, dijo que se puede gobernar haciendo planteamientos correctos.

Reformar la justicia

En la entrevista, Vizcarra manifestó que es una necesidad del país llevar adelante la corrección de las instituciones y añadió que la población quiere sacar a los deshonestos. Sustentó que impulsa las reformas del sistema de justicia basado en que los peruanos no creen en el Poder Judicial.

"Estoy al igual que el gran porcentaje de ciudadanos que no confía, no es predictible la justicia en Perú", expresó.

Venezuela en la mira

Tras cuestionar al gobierno de Nicolás Maduro, Vizcarra sostuvo que "estamos llegando a una situación límite", por la migración de venezolanos hacia su país.

El jefe de Estado indicó que la cifra de 200 mil venezolanos "era el punto de equilibrio" para el país, pero a la fecha hay más del doble. "Los mismos venezolanos que llegan ya no encuentran posibilidad laboral (...) La crisis venezolana se convierte en un problema peruano".