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Luksic y Heineken aumentan apuesta por CCU comprando US$ 54 millones en acciones

Los controladores de la firma adquirieron 5,7 millones de acciones a un precio de $6.800 por papel, lo que equivale a un total de US$ 53,8 millones.

Por: Francisca Acevedo O. | Publicado: Jueves 25 de marzo de 2021 a las 16:53 hrs.
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Andronico Luksic presidente de CCU. Foto: Patricio Valenzuela
Andronico Luksic presidente de CCU. Foto: Patricio Valenzuela

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Quiñenco y Heineken, socios controladores de la Compañía de Cervecerías Unidas (CCU), decidieron aumentar su apuesta por la empresa y este miércoles adquirieron en la bolsa un paquete de acciones.

De acuerdo a información de la Bolsa de Santiago, Inversiones IRSA -sociedad por la cual el grupo Luksic y la cervecera holandesa invierten en partes iguales en CCU- adquirieron 5,7 millones de papeles a un precio promedio de $ 6.800.

Con esto, la operación que fue realizada por la corredora de bolsa de JPMorgan significó un desembolso de unos US$ 53,8 millones. Tras la compra, Inversiones Irsa aumentó su posición de 60% a 61,56%.

En la jornada, CCU -al igual que la mayoría de las empresas locales ante los anuncios de cuarentena- cayó 1,8% cerrando en un precio de $ 6.551 por acción. De todas formas, en lo que va del año la acción ha subido casi 25%.

Luego de haber tenido pérdidas durante el peak de la pandemia, la cervecería cerró 2020 con ganancias. La firma con presencia en Chile, Argentina, Bolivia, Colombia, Paraguay y Uruguay reportó utilidades por $ 96.152 millones. Sin embargo, esto representa una caída de 26% frente a lo alcanzado en 2019.

Por su parte, el ingreso por ventas aumentó un 1,9% en comparación con 2019, explicado por un alza de 2,2% de los volúmenes consolidados, compensado parcialmente por una disminución de 0,3% en los precios promedio en CLP.

Polémica por planta de reciclaje

Este mes, CCU, Embotelladora Andina y Embonor hicieron noticia por cancelar el acuerdo para la construcción de una planta de reciclajes PET, que habían anunciado en noviembre del año pasado.

La iniciativa no estaba exenta de polémica. Actores de la industria del reciclaje habían mostrado sus reparos ante la conformación de una nueva sociedad que afectara a la competencia en el sector.

La iniciativa se realizaría a través de una nueva sociedad de propiedad compartida entre Fábrica de Envases Plásticos S.A. (Plasco) -filial de CCU- y Envases CMF S.A. -sociedad anónima cerrada coligada a Embonor y Embotelladora Andina, donde cada una mantiene un 50% de participación accionaria.

Para lo anterior, iban a contribuir a la nueva sociedad con US$ 12 millones, así como a comprar una determinada cantidad de PET reciclado.

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