Bonos verdes siguen ganando atractivo como alternativa de inversión

Desde sus comienzos en Europa, hace poco más de una década, el mercado de bonos verdes viene creciendo a una tasa acelerada, prácticamente duplicándose todos los años. Tras alcanzar un récord de US$ 155 mil millones en 2017, las proyecciones apuntan ahora a que las emisiones llegarán este año a los US$ 250 mil millones. Y los expertos creen que la tendencia se está consolidando.

Así lo señala Alex Toledo, country manager del administrador de activos británico Schroeders, quien participó en la última Semana de las Finanzas Climáticas, organizada por The Corporate Leaders Group for Climate Change (CLG Chile) y la Iniciativa Financiera del Programa Ambiental de Naciones Unidas (UNEP FI).

Para Toledo, ya se puede advertir un cambio en las preferencias de los inversionistas hacia esta clase de activos, especialmente en los inversionistas retail. Según un sondeo realizado por Schroders, 76% de los inversionistas declara que la sustentabilidad de las inversiones se ha vuelto más importante en los últimos cinco años, mientras que sólo 25% dice estar preocupado de que los retornos de las inversiones sustentables sean menores que los de otras alternativas.

“Los inversionistas institucionales están inmersos en la competencia, y por eso a la hora de tomar decisiones, los factores más relevantes son otros, pero si se compara con lo que están haciendo hoy en día las personas, tienen menos miedo, porque ellas mismas manejan sus portafolios”, explicó Toledo. “Al final, eso mismo se va a traspasar a los institucionales, porque la sociedad les va a traspasar esa presión”.