Mercados en Acción

Credit Suisse advierte sobre aumento del nivel de deuda corporativa en el mundo

Si bien la situación no representa un riesgo sistémico, dice la firma, sí ha aumentado el riesgo de cese de pagos.

Por: Javiera Donos | Publicado: Martes 12 de febrero de 2019 a las 04:00 hrs.
  • T+
  • T-

Compartir

Después de la crisis financiera, las compañías del mundo empezaron un proceso de desapalancamiento relevante, pero en los últimos años los stocks de deuda han ido aumentando, según advirtió Credit Suisse en un informe reciente.

Imagen foto_00000003

La firma de capitales suizos señala que el ambiente de bajas tasas de interés y las mayores restricciones para los bancos llevaron a las compañías a acudir con más frecuencia al mercado de capitales en búsqueda de financiamiento más barato.

Así, según cifras de McKinsey, la proporción de los bonos en la deuda corporativa de empresas no financieras pasó de 10% en 2000 y 2007 a 19% en 2017. En mercados emergentes, destaca Credit Suisse, se dio la misma tendencia, con la proporción de bonos corporativos llegando al 25% en Brasil.

Las emisiones de deuda corporativa también vieron un crecimiento explosivo, aumentando a una tasa de crecimiento sobre 10% anual entre 2007 y 2017.

“Desde 2014 en adelante el nivel de apalancamiento corporativo se ha elevado”, indica la firma financiera. “El apalancamiento corporativo grueso de las empresas no financieras ahora está en niveles vistos antes del período previo a la crisis financiera”, añadió.

Credit Suisse dice que esta métrica está en un punto similar a los de finales de la década de los 90, “el período al que siguió un episodio de estrés a la deuda corporativa”.

A todo esto se suma que el mundo de la deuda de grado de inversión está de capa caída. Si bien es “difícil” ver un deterioro significativo en la calidad crediticia a nivel global, “excavando más profundo, el deterioro de la calidad es más visible”.

Según Credit Suisse, lo que ha pasado con las “notas” crediticias de las compañías del mundo industrial es reflejo de esta tendencia. En 2013, la proporción de bonos con calificación A y BBB estaba en torno a 45%, pero a mediados del año pasado los papeles BBB –que tienen una calidad crediticia inferior a los A– estaba sobre 50%, mientras que los A se ubicaban bajo 30%.

En el mundo high yield, eso sí, las cosas se ven más resilientes. “A diferencia de los emisores con clasificación de grado de inversión, las compañías high yield se han desapalancado sustancialmente desde la caída que provocó la baja de los commodities en 2015”, indicó la firma de capitales suizos.

Eso sí, nada de esto es una señal de alerta. Todo va a depender de cómo evolucione la subida de tasas en el mundo desarrollado. “Si es que el crecimiento se modera y la Reserva Federal desacelera o incluso detiene su ciclo de subida de tasas, el riesgo de un aumento significativo de defaults debería mantenerse más limitado”, recalca Credit Suisse. Además, la volatilidad que se registró el año pasado en los mercados financieros le puso freno al entusiasmo de los inversionistas.

Imagen foto_00000001

Lo más leído