¿Desarrollo de energías renovables generará un boom en el cobre?

El precio del cobre no atraviesa un buen momento.

En ello ha influido la baja demanda del metal proyectada para este año, que según las últimas proyecciones de Cochilco sería de 2%, comparada con el 8,3% de 2014. Y es que China, principal consumidor del metal en el mundo, sigue mostrando signos de desaceleración.

Pero el metal podría tener un respiro los próximos años. Así lo creen en la gestora de inversión U.S Global Investor, quienes adelantan que el commodity puede tener un “boom” en el mediano plazo. ¿A qué se debe esto? Según la entidad, en los próximos 25 años el mundo invertirá

US$ 8 billones (millones de millones) en energías renovables, lo que responde a la necesidad de aumentar la penetración de las energías renovables y “la mejora de la eficiencia energética”.

“Ésta es una buena noticia para el cobre, necesario para la conducción de la electricidad en todas las tecnologías de energía, ya sean tradicionales o alternativas. El uso de algunos combustibles fósiles que emiten carbono, por ejemplo, probablemente se dejarán a lo largo de los años, pero el cobre seguirá siendo un componente insustituible en nuestras crecientes necesidades de energía”, comentó en una publicación.

Nuevas tecnologías al servicio del cobre

Pero el consumo no sólo aumentará porque la demanda de energía crece, sino que las nuevas tecnologías que trae la energía requieren de más cobre en comparación con las fuentes tradicionales. Un ejemplo de ello es que cada megavatio de capacidad de energía eólica requiere en promedio de 3,6 toneladas de cobre.

Pero donde se verá el mayor crecimiento será en la producción de automóviles híbridos y eléctricos, los que utilizan dos o tres veces más cobre que los motores de combustión interna.

Por lo anterior es que algunos ya se cuestionan si la oferta mundial de algunos elementos básicos pueda satisfacer la demanda, considerando que la construcción por parte de Tesla Motor de su mega fábrica Gigafactory, que elaborará cerca de 500 mil autos eléctricos en base a baterías de iones de litio.

Se espera que la fábrica consuma anualmente 17 millones de toneladas de cobre y 25.000 toneladas de litio (aproximadamente una quinta parte de la oferta en todo el mundo), entre otros.

“Esto no debería ser una buena noticia para los metales básicos empresas mineras líderes en la industria de Freeport-McMoRan, Río Tinto, Lundin Mining y Glencore”, concluye.