Cartas

Vivienda y familia: nuevos tiempos, nuevos estándares

  • T+
  • T-

Compartir

Señora Directora:

Actualmente, una familia de cuatro personas que busca adquirir su primera vivienda difícilmente podrá encontrar por menos de 3.000 UF una propiedad en buenas condiciones, de un tamaño razonable y con una relativa buena conectividad en la Región Metropolitana.

Por otra parte, sabemos que, salvo casos particulares, las instituciones financieras exigen un pie mínimo de 20% para otorgar un crédito hipotecario. Es decir, si una familia quiere adquirir una propiedad de 3.000 UF, deberá tener ahorros de a lo menos 600 UF –cerca de $17 millones–; adicionalmente, deberá acreditar un nivel de ingresos tal, $ 1,7 millones en este ejemplo, que le permitan financiar un dividendo mensual aproximado de $ 425.000 por 20 años.

Si a lo anterior le sumamos que el ingreso promedio de una familia chilena es de $ 950.000 aproximadamente, queda en evidencia que es urgente revisar los montos de los subsidios que el Estado está otorgando. Dada esta realidad, propongo, por una parte, aumentar de 2.200 UF a 3.200 UF el precio máximo de las propiedades que se pueden acoger a subsidios, y por otra, que el monto de dicho aporte estatal sea tal, que el dividendo resultante nunca sea superior a los $238.000 mensuales, lo que equivale a ¼ del ingreso promedio de un hogar.

Con este mecanismo, la familia chilena del ejemplo recibiría un subsidio de 1.200 UF, lo que le permitiría adquirir una propiedad con las condiciones mínimas para acceder a una calidad de vida aceptable.

Sergio Barros
Gerente general de Enlace Inmobiliario

Lo más leído