Chile, centro financiero

Felipe Larraín Bascuñán

Algunos lo consideran una quimera. Pero no lo es. Objetivo ambicioso, pero alcanzable, de los que valen la pena. Actualmente el sector financiero chileno representa poco más del 5% del PIB, en Singapur es casi 15% y en Hong Kong y Luxemburgo es entre 20% y 25% del producto. En Chile el sector financiero genera unos 165.000 empleos, los que podrían más que duplicarse durante la próxima década si logramos este objetivo.

No es necesario ser una economía grande para posicionarnos como una plataforma financiera internacional, como lo prueban Hong Kong, Singapur y Luxemburgo, este último con menos de un cuarto del tamaño económico de Chile. Todos estos países han experimentado un fuerte crecimiento del sector financiero, generándose un círculo virtuoso de más oportunidades para sus habitantes y empleos de mejor calidad. Se trata de un camino que ofrece promisorias perspectivas para nuestro país, que tiene un mercado pequeño, pero muy integrado al mundo, y con índices de calidad institucional y macroeconómica que están entre los mejores del mundo emergente.

El último Chile Day realizado en Londres nos permitió avanzar en este camino. Durante los próximos seis meses vamos a concretar y cumplir con los anuncios para convertir a nuestro país en un centro financiero regional. La meta es conocida, es un sueño que Chile tiene hace muchos años. Pero esta vez hemos trazado un cronograma claro y nos comprometimos a avanzar en pasos concretos que contemplan diez ejes, entre los que se consideran simplificar los procedimientos para inversionistas extranjeros, promoviendo su ingreso a nuestro mercado, y facilitar el registro de valores extranjeros en Chile, para posicionarnos como un centro financiero de clase mundial. Además, tomaremos medidas que apuntan a obtener una mayor rentabilidad para los ahorros de los pensionados.

El anuncio en el ChileDay fue el resultado de un largo trabajo multidisciplinario y comprometido que ha sido liderado por el Ministerio de Hacienda, y que contó con el valioso aporte del Consejo Consultivo de Mercado de Capitales, ente asesor del Ministerio conformado por destacados expertos del ámbito privado.

Pero este trabajo no podría fructificar sin la entusiasta participación que hemos tenido de todos los organismos reguladores del mercado financiero, la Comisión para el Mercado Financiero, el Servicio de Impuestos Internos, la Superintendencia de Pensiones y la Unidad de Análisis Financiero. Adicionalmente, el Banco Central, valorando la importancia de este objetivo, ha contribuido con una serie de iniciativas que complementan de forma valiosa los pasos que debemos dar para lograr esta meta, incluyendo la internacionalización del peso chileno.

Estamos convencidos de que hacer de Chile un centro financiero regional generará un importante impulso en el crecimiento económico y permitirá diversificarnos, objetivo que es parte de la agenda económica que impulsa el gobierno del Presidente Piñera.

Los números son claros: si en los próximos 15 años la participación del sector financiero en el PIB aumentara la mitad de lo que creció en Singapur en un lapso similar, el empleo en el sector se triplicaría. Y en momentos en que la economía digital plantea una serie de desafíos para el mercado laboral, debemos ser capaces de generar las condiciones para crear nuevas y mejores fuentes de empleo. Ese es el desafío que nos motiva.