Enrique Marshall

¿Y las sucursales de bancos extranjeros?

Enrique Marshall Director Magíster en Banca y Mercados Financieros PUCV, Exvicepresidente del Banco Central

Por: Enrique Marshall | Publicado: Miércoles 12 de febrero de 2020 a las 04:00 hrs.
  • T+
  • T-

Compartir

Enrique Marshall

Enrique Marshall

Las sucursales de bancos extranjeros tuvieron en el pasado una presencia muy relevante en nuestro país. Prestaban servicios que los bancos nacionales, por distintas razones, no siempre estaban en condiciones de ofrecer. Pero los tiempos cambiaron. Algunas de estas sucursales devinieron en bancos con operaciones activas en Chile, otras fueron reemplazadas por una pequeña oficina de representación. Y un tercer grupo simplemente cerró sus puertas.

Imagen foto_00000001

En los últimos años se han abierto dos sucursales de bancos chinos, lo que responde a razones muy específicas. Lo cierto, en todo caso, es que el número de sucursales se ha reducido de quince a fines de los ochenta a solamente cuatro hoy, lo que no se condice con nuestra pretensión de convertirnos en un centro financiero internacional.

¿Pero qué explica esta gradual reducción del número de estas oficinas? Causas hay varias, pero quisiera llamar la atención sobre dos de ellas

Primero, es claro que su caso de negocios se ha debilitado. Parte de sus actividades pueden ser hechas hoy desde el exterior con el apoyo de una oficina de representación, que tiene costos mucho más bajos y regulaciones simples. Esta es una realidad que no podemos modificar.

Sin embargo, existe una segunda causa sobre la que sí podemos actuar: el trato dispensado a estas sucursales es bastante menos amistoso de lo que se supone. Es cierto que el marco de regulación y supervisión es idéntico al aplicado a los bancos nacionales. Sin embargo, ello no tiene presente el perfil de estas oficinas, los riesgos que asumen, su reducida importancia sistémica y el apoyo brindado por sus respectivas casas matrices.

Es importante señalar que la presencia de bancos internacionales, bajo el formato de una sucursal, sigue siendo positivo para nuestro país. Estas oficinas han hecho y siguen haciendo una muy positiva contribución, especialmente en determinados segmentos o nichos de mercado. Por todo ello, me parece conveniente efectuar una revisión de algunos aspectos del marco de regulación y supervisión aplicable a estas entidades, en la perspectiva de preservar su interés por operar en nuestro medio. La experiencia comparada puede aportar luces para efectos de este análisis.

En mi opinión, un punto relevante es el referido a los límites individuales de crédito. Estos resultan hoy excesivamente restrictivos para sucursales de bancos internacionales de primer nivel, que tienen siempre la opción de registrar sus operaciones fuera del país. La flexibilización de esta norma podría ir unida a otra que circunscriba la captación de depósitos por parte de estas entidades al mercado mayorista o al de inversionistas calificados. Esta es una práctica habitual en economías avanzadas.

En todo caso, las actuales reglas del juego, sin mediar ajustes o perfeccionamientos, conducirán a que la declinación observada hasta ahora continúe.

Lo más leído