Columnistas

Reconocer el compromiso con la integridad

Gonzalo Said Presidente de Fundación Generación Empresarial

Por: Gonzalo Said | Publicado: Viernes 16 de junio de 2017 a las 04:00 hrs.
  • T+
  • T-

Compartir

Este año entregamos por primera vez el Premio Generación Empresarial-DF al compromiso con la integridad. El reconocimiento se basó en un análisis de las buenas prácticas implementadas en las organizaciones participantes (políticas, normativas, códigos de ética, entre otros) y en la aplicación del Barómetro de Valores y Ética Empresarial. Esta herramienta, que como fundación hemos puesto a disposición de las empresas, mide la percepción de los colaboradores sobre la cultura ética y de cumplimiento corporativa.

El premio pretende rescatar buenos ejemplos, compartir aprendizajes y señalar caminos. Sabemos que las empresas son blanco de fuertes críticas y que cuesta salir a hablar y a reconocer lo positivo en un clima adverso. Cuesta, también, tener la humildad y el coraje para permitir que otros nos midan y evalúen. Por eso, valoramos enormemente a quienes decidieron participar en esta premiación, que en su primera versión contó con la participación de 30 compañías, entre las que un jurado de altísimo nivel destacó a Antofagasta Minerals, Transelec y VTR.

Preocuparse de que se cumpla la ley, contar con políticas de libre competencia y conflicto de interés, así como con programas preventivos y de detección oportuna es fundamental hoy. Pero hay un desafío todavía más grande: lograr que el ambiente ético se viva y respire en la organización, que impregne la cultura desde el directorio y los dueños en adelante y que se vuelva un sello organizacional ético y valórico, que tenga en su base el compromiso con la sociedad y el bien común. De eso se trata el reconocimiento. La integridad se apoya en acciones, herramientas y políticas, es cierto, pero, en su esencia, la integridad es la medida de nuestros valores. Es la expresión de nuestra cultura, de nuestro ethos, de lo que somos en realidad.

Por eso, la invitación a los líderes de las compañías participantes es a asumir un nuevo desafío: el de compartir con sus pares sus aprendizajes, dolores, lecciones y logros. Y contagiar el interés y entusiasmo que han demostrado por avanzar en su cultura ética, mostrando orgullosos sus resultados. Porque los desafíos del nuevo escenario social requieren de todas las empresas y empresarios, haciéndolos corresponsables en la cruzada por ser mejores. Porque cuando una empresa se equivoca y cae, todo el sistema es arrastrado con ella. Por lo mismo, cuando una empresa aprende y mejora, todos deberíamos también ser mejores gracias a su ejemplo y trabajo.

Queremos que esta instancia crezca en el tiempo y se transforme en un referente del cambio positivo en las empresas, que Chile tanto necesita. La invitación a convertirnos en líderes en ética e integridad, está extendida.

Lo más leído