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Repatriación de capitales: las señales son claras

Andrés Martínez Socio de Tax & Legal de KPMG

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Andrés Martínez

Como se ha publicado, tras la dictación del ultimo oficio en la materia, el SII ha avanzado significativamente en despejar diversas dudas que aun existían en torno al denominado sistema voluntario de repatriación o regularización de inversiones en el exterior. Bajo esta finalidad, la autoridad fiscal entregó una serie de lineamientos que otorgan mayores certezas a la hora de enfrentar la declaración, en relación a diversos aspectos que hasta la fecha ponían en duda el éxito de la medida.

En este sentido, hay que recordar cuál es el objeto la normativa, de la mano con las situaciones que se pretenden evitar. En términos generales, el objeto de ella obedece no tan sólo al interés de un mayor recaudo fiscal (presente y futuro), sino que asimismo instar a una conveniente regularización en un mundo en que el intercambio de información entre autoridades, sobre el quehacer de los ciudadanos en diversos aspectos, es cada vez mayor. En cuanto a las situaciones que se pretenden evitar, destaca el que se acojan a este sistema extraordinario fondos mal habidos fruto del lavado de activos, entre otros.

Desde un comienzo advertimos acerca de la difícil tarea que tenía la autoridad, en cuanto a facilitar el cumplimiento práctico de la normativa a los contribuyentes a quienes iba dirigida, evitando como contrapartida su uso indebido. Es que, por ejemplo, bajo el pretexto de tutelar este adecuado uso, se podía poner en claro riesgo su éxito, con exigencias absurdas o muy difíciles de cumplir en la práctica.

Son diversas las señales que el SII ha dado, las quesólo pueden ser entendidas como una manifestación de voluntad,encaminada a que el programa de repatriación o regularización tenga éxito, sorteándose adecuadamente la dificultad antes advertida. En este sentido, el SII deja en evidencia que está haciendo los esfuerzos necesarios para que los contribuyentes a quienes va dirigida, cuenten con la razonable seguridad jurídica de no verse expuestos a situaciones de cobros o sanciones no consideradas, bajo estándares que permitan evitar su mal uso.

El tiempo se acaba y la ventana se cierra a fin de año, quedando sólo esperar unos pocos meses para ver qué éxito tendrá. Hasta ahora, sólo mencionar que cada vez han sido más quienes han decidido acogerse a ella, evitando eventuales cuestionamientos futuros de la autoridad, alineándose con las prácticas de transparencia que ya indiscutiblemente se han instalado en la actualidad.

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