TLC con Corea del Sur: Una modernización estratégica para Chile

Hablar de Corea del Sur es hablar de un grande. Una de las economías más desarrolladas de Asia, top 14 del mundo, y con un crecimiento industrial que impresiona, en rubros como el siderúrgico, automovilístico y tecnológico.

Para Chile, el haber suscrito un acuerdo hace 14 años —el primero de un país latinoamericano con Asia— fue un acierto de proporciones, que esperamos poder seguir consolidando con el proceso de modernización del TLC que comenzará este año.

Corea del Sur es en la actualidad el quinto socio comercial de Chile —luego de China, Estados Unidos, Brasil y Japón—, y el cuarto destino de nuestros envíos. En 2017 el intercambio comercial alcanzó US$6.150 millones, representando el 5% del comercio exterior chileno.

Lo anterior no sólo implica vender productos chilenos a Corea y poder comprar un televisor, un automóvil o un celular más barato en Chile. Nuestra apertura comercial con el mundo ha impactado en la creación de miles de empleos, en el acceso al desarrollo, a cooperación, a experiencias en temas tecnológicos y de educación. Todo lo cual finalmente se traduce en oportunidades.

Pero es tiempo de ir aún más allá. En el TLC vigente con Corea quedaron productos excluidos de preferencias arancelarias, destacando 370 en la llamada categoría “Doha Development Agenda” (DDA), que se destrabaría tras la conclusión de Doha. La mayoría de estos son del sector agroindustrial, con gran potencial para nuestros exportadores. Dado que Doha se encuentra en pausa, se hace necesario avanzar a través de una modernización que contemple la exclusión de los DDA, tal como el país asiático ya hizo con México y Estados Unidos.

Además, es imperativo incluir en ese proceso los nuevos temas, claves para enfrentar los desafíos que el comercio internacional enfrenta en la actualidad. Lo anterior, sin descartar un acercamiento futuro a través del CPTPP y en la Alianza del Pacífico, proceso de integración del cual el país asiático ya es miembro Observador y aspira a ser Estado Asociado, conforme fue anunciado en la pasada Cumbre de Puerto Vallarta.

El Pacífico es nuestra columna vertebral, y desde ahí nos interesa seguir estrechando la relación con Corea del Sur, pero también con China e India, así como con otros mercados asiáticos. Para el Ministerio de Relaciones Exteriores y Direcon, el Foro de Cooperación Asia Pacífico (APEC), y la importancia de consolidar un gran acuerdo de libre comercio en la región, así como la realización del Foro el 2019, serán hitos centrales de nuestra agenda, algo también reforzado por los liderazgos del Presidente Piñera y el canciller Ampuero.

En definitiva, Asia Pacífico y Corea del Sur son fundamentales en ese camino. El Tratado de Libre Comercio que suscribimos fue la primera puerta de entrada a ese continente que respira oportunidades, dinamismo y crecimiento. Diez de los 26 acuerdos que tiene Chile son con Asia, y el continente concentra casi el 50% de nuestro intercambio comercial. Por ello, es clave y necesario seguir estrechando nuestra relación. Asia Pacífico y Corea del Sur son sinónimos de futuro y buscaremos maximizar las oportunidades de nuestra proyección natural hacia esa región.