Baja en los ingresos estructurales
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Esta semana continuará en el Congreso uno de los debates más complejos que se dan cada año: el referido al proyecto de ley de Presupuestos, en este caso para 2017.
Y lo más probable es que en más de un área ministerial surgan peticiones de más gasto, el que en términos generales se prevé que crecerá 2,7%, el más bajo desde 2003.
Así, la tarea de contención de Hacienda será clave, sobre todo cuando sus propias cifras dan cuenta de un escenario fiscal estrecho no sólo para el ejercicio venidero sino que hasta fines de la década. Dicho de otra forma, los gastos comprometidos -reformas incluidas- bien pueden exceder la capacidad de ingresos o, bien -que sería lo mismo-, el próximo gobierno tendrá un espacio reducido para nuevos gastos.
De hecho, un informe de Libertad y Desarrollo (LyD) estima que los ingresos estructurales del Fisco hacia 2019 se reducirán en US$ 4.297 millones. ¿La razón? La caída tanto en el PIB como el precio de cobre de tendencia que sustentan el Presupuesto.
Precisamente, en junio los comités de expertos citados por Hacienda recortaron de 3,6% a 3% el Producto de tendencia, mientras que en un centavo la libra del metal esperada a futuro, a US$ 2,56.
